EFE.- La nieve ha sido hoy la responsable de las alertas en 19 provincias españolas, aunque sólo Cuenca ha alcanzado el nivel naranja (riesgo importante), por nevadas que han acumulado hasta 20 centímetros en la Serranía y cinco en la capital conquense.
La abundante nieve ha complicado en buena parte de Castilla-La Mancha el tránsito de vehículos por las carreteras de la región y ha afectado a 93 rutas escolares en Guadalajara, Albacete, Ciudad Real y, sobre todo, en Cuenca y en el puerto de Riópar (Albacete), donde es necesario el uso de cadenas.
En Madrid, esta mañana han sido movilizados 56 quitanieves y más de 200 efectivos para despejar las carreteras ante las nevadas, que han obligado al uso de cadenas en los puertos de Navacerrada, Cotos, La Morcuera, Canencia y Navafría.
Además, la autovía A-1 (Madrid-Burgos) ha quedado cortada para todo tipo de vehículos a la altura del kilómetro 99, en término de Santo Tomé del Puerto (Segovia), en dirección a Madrid.
Las nevadas igualmente ha dificultado el tráfico en Cantabria, con cinco puertos cerrados y cadenas en otros siete puertos de montaña y tramos de carretera, la mayoría de la red autonómica mientras la región sigue en alerta por viento fuerte y temporal costero.
En las montañas de Lugo y Ourense, la nieve acumulada en la red de carreteras secundarias ha dejado hoy sin clase a casi 300 alumnos, al resultar afectadas las rutas de transporte escolar de 16 centros.
Además de los problemas ocasionados por las nevadas, 12 provincias más han estado en alerta por viento y fenómenos costeros, aunque sólo dos en naranja, A Coruña y Lugo.
La flota de Lugo se ha quedado una jornada más en tierra, lo que ya suma doce días de parada, como consecuencia de las fuertes rachas de viento que llegaron a alcanzar los 140 kilómetros por hora la pasada noche en Burela.
En Asturias, el temporal también ha dejado rachas de viento de 123 kilómetros a la hora y el presidente de la Federación de Cofradías, Dimas García, ha transmitido hoy la preocupación de las embarcaciones de bajura, porque la sucesión de temporales es una «ruina» que apenas da días de respiro a un colectivo de trabajadores que si no faena no cobra.
Además, el temporal también es responsable del desabastecimiento y del aumento de precio de algunas especies de pescado y marisco en Cataluña, han confirmado a Efe fuentes del mercado mayorista central Mercabarna.
En Galicia las fuertes precipitaciones de las últimas semanas han provocado que el río Miño se haya desbordado a su paso por la ciudad de Lugo, donde se han inundando las instalaciones del club fluvial, de un restaurante, del Balneario y del parque municipal, aunque el servicio de Protección Civil ha afirmado que la situación «no es preocupante».
Las fuertes rachas de viento hoy en el País Vasco han tirado un andamio colocado en un edificio del barrio de Astrabudua, en la localidad vizcaína de Erandio, sin que se hayan registrado heridos.
En Cataluña, los bomberos de la Generalitat han realizado 14 intervenciones desde ayer por episodios relacionados con los fuertes vientos, que en algunos puntos de Girona han alcanzado los 118,8 kilómetros por hora.
Según ha informado Protección Civil, en todos los casos las causas de intervención fueron árboles tumbados y peligro de caída de elementos estructurales y del mobiliario urbano.
En Valencia, los bomberos del Consorcio Provincial de Castellón han intervenido en cuatro incendios de pequeña envergadura y en diversas caídas de árboles y cornisas en la provincia debido al temporal de viento.
Mientras, en Andalucía el temporal ha amainado y la flota pesquera del Golfo de Cádiz ha vuelto hoy a faenar tras casi una semana amarrada.
Ante todos los daños causados por el temporal, el Gobierno central hará una evaluación definitiva de los perjuicios cuando «acabe» el mal tiempo y buscará un acuerdo con las comunidades autonómicas y los ayuntamientos para sufragar los gastos, ha informado hoy el director general de Protección Civil y Emergencias, Juan Díaz.