El senador del PP, Ignacio Alfredo González, subrayó que esta ley debe ser "un gran soporte" para que estas compañías tengan opción de ser competitivas, tengan mayor dimensión económica e integración comercial, reforzar su internacionalización, la concentración de la oferta y su papel como motores del asociacionismo agrario, al tiempo que se amplían sus actividades a servicios sociales y asistenciales.
Tranquilizó además "a sus señorías" porque la iniciativa cumple los principios constitucionales, las normas de la UE y las legislaciones autonómicas" pese a los temores suscitados desde algunas formaciones políticas.
4.000 cooperativas en toda España
En España, 4.000 cooperativas apenas facturan 19.000 millones de euros, mientras que tres entidades de Países Bajos suman 22.095 millones; la primera española acapara 1.005 millones, lejos de la principal europea en facturación, con 9.500 millones de euros, dijo.
La senadora socialista Antonia Jesús Moro cree que el proyecto "se queda corto", tiene "carencias e imprecisiones" y es "poco ambiciosa", aunque mostró su apoyo a esta ley, para la que pide mejoras.
En este sentido, Moro pidió que el Gobierno arbitre los fondos necesarios para que la norma "no se quede en una simple declaración de intenciones".
"Hay un amplio acuerdo" sobre el texto y el sector "necesita fortalecerse" y "ganar competitividad" a nivel internacional, por lo que "necesitamos este impulso" y que la ley ponga instrumentos al alcance cooperativo para combatir las desigualdades en el mercado, subrayó el senador de Entesa del Progrés de Cataluña Francisco Boya.
No obstante, mostró su preocupación por que su financiación pueda "acabar pellizcando" los fondos de desarrollo rural o autonómicos.
Una buena ley para hacerlas más competititvas
Desde UPN (Grupo Mixto), Amelia Salanueva afirmó que "es una buena ley", "oportuna" y que ha tenido amplios consensos y subrayó que debe lograr que las cooperativas sean más competitivas.
Manel Plana (CiU) defendió la abstención de su partido por una posible invasión de competencias autonómicas, pese a reconocer que es necesario acabar con la atomización del sector cooperativa que acaba perjudicando la comercialización y el valor añadido.
Por otra parte, CiU mostró también sus dudas presupuestarias del proyecto, tanto en cuantía como en procedencia de los fondos