Las organizaciones agrarias UPA y COAG continuarán con la hoja de ruta establecida y convocan una nueva manifestación, esta vez en Madrid, para la segunda quincena de septiembre. Se mantiene así el plan establecido como protesta por los bajos precios en origen del aceite de oliva que comenzó con la gran concentración en Jaén a finales de mayo y siguió con la masiva manifestación de Sevilla en julio. «Ahora, como la crítica situación que atraviesan los olivareros no ha revertido, llevamos la protesta a Madrid», aseguran.
Los secretarios generales de UPA Jaén y COAG Jaén, Cristóbal Cano y Juan Luis Ávila, respectivamente, vuelven a hacer un llamamiento a todo el sector y a la sociedad en general para secundar esta tercera movilización. Y lo hacen apelando «no solo a la supervivencia del olivar tradicional, sino también al futuro de nuestros pueblos, a la fijación de la población al territorio y al terrible escenario de despoblación que sufrimos en buena parte de España».
El objetivo de esta tercera manifestación sigue siendo el mismo de la hoja de ruta marcada desde el principio: visualizar la crítica situación de los productores, revertir la situación de bajos precios en origen que sufrimos los olivareros, conseguir el equilibrio de los precios por encima de los costes de producción y alcanzar, definitivamente, soluciones globales a un problema estructural, con medidas tan necesarias como la autorregulación; la mejora de la Ley de Cadena Agroalimentaria; la lucha contra la venta a pérdidas como una práctica desleal; que la UE permita algunas excepciones en cuanto a competencia; la actualización del mecanismo de activación del almacenamiento privado a precios del siglo XXI, o que el propio sector se una en estructuras donde se establezcan estrategias que velen por los intereses de los agricultores.
UPA y COAG se reafirman en que Jaén, como líder mundial en la producción de aceite de oliva de la máxima calidad, «el único oro líquido que se regala puesto que lo estamos vendiendo como un producto low cost, debe comportarse igualmente como líder en comercialización y en dinamización de su consumo a nivel mundial. Y para alcanzar esos objetivos, nos comprometimos con los olivareros en que no íbamos a parar hasta revertir esta situación de bajos precios en origen, porque el sector no puede seguir perdiendo».