El ligero incremento que se prevé en la superficie cultivada con control biológico se debe, principalmente, al tomate, que pasará de las 8.820 hectáreas de la campaña recién terminada, a 9.160, lo que supone un aumento de casi un 4 por ciento, que compensa los leves descensos que se prevén en pimiento, sandía, pepino y melón.
Se calcula que más del 82 por ciento de las plantaciones de tomate se cultivarán con control biológico de plagas. Pese al avance del tomate, el producto con mayor superficie cultivada con este método de cultivo sigue siendo el pimiento con 9.300 hectáreas, unas 40 menos que en la temporada 2013-2014, lo que representa prácticamente el 100 por cien de la extensión de este producto.
En cuanto al melón, con la previsión de 1.860 hectáreas, se estima un 7,5 por ciento menos que en la campaña anterior. Mientras que la estimación de sandía cultivada ronda las 1.450 hectáreas, unas treinta menos que en 2013.
Ortiz destaca la "apuesta decidida" del sector hortofrutícola de Almería por la generalización del control biológico para luchar contra las plagas y enfermedades de las plantas, una apuesta que "además de la reducción de los tratamientos con productos fitosanitarios y el ahorro en los gastos de campaña, responde a los gustos y exigencias de los mercados y los consumidores, que cada vez demandan más los productos seguros y de calidad".