Las ayudas europeas, como las destinadas a mejora genética, concluyen este año y el objetivo es que en la nueva Política Agrícola Común (PAC) se puedan mantener, vía pagos agroambientales.
Para ello, la Junta de Castilla y León ayudará a las asociaciones de criadores a mantener los libros genealógicos, "haciendo un esfuerzo especial", para que puedan optar a futuras ayudas, según Silvia Clemente.
El precio de este ganado ha bajado cerca del 20 por ciento desde 2009 y otra de las soluciones que se estudia es que pueda acceder ayudas para determinados sectores, en la nueva PAC, lo que intentará que se tengan en cuenta Clemente en próximas reuniones que tiene previstas en Bruselas.
Una marca de garantía a nivel estatal
Finalmente, la consejera se ha referido a la posibilidad de crear una marca de garantía, incluso de ámbito nacional, ya que Aragón y Cantabria también tienen una importante cabaña de esta raza y las asociaciones de criadores trabajan para federarse.
Esta marca de calidad, ha añadido, contribuiría además a frenar la "intromisión" en el mercado de caballos que no son para carne.