El consejero ha recalcado que este pacto representa “un avance fundamental hacia el mantenimiento de un espacio rural vivo y dinámico, poblado y conectado con el resto de la sociedad, basado en modelos de crecimiento sostenibles e innovadores, que garanticen el respeto al medio ambiente y al territorio”.
Asimismo, ha valorado el documento como un paso “en la dirección correcta” y “en sintonía con las directrices europeas, que demandan unidad en la acción, coordinación y cooperación”. Planas ha defendido que la estrategia que se desarrolle “será más acertada cuento más compartida sea. Y por supuesto, tendrá la fuerza necesaria sólo si es impulsada por las partes implicadas y será eficaz si es puesta en práctica por sus protagonistas”.
La competencia de los mercados, la volatilidad de los precios y los desequilibrios en la cadena agroalimentaria, así como el cambio global, el riesgo de deterioro de los recursos naturales y, por supuesto, la aplicación de la nueva reforma de la Política Agrícola Común (PAC), son algunos de los desafíos de futuro destacados por el consejero durante su intervención. Luis Planas ha hecho hincapié en que “todo ello requiere una estrategia integral y participativa que nos permita apostar por nuestros jóvenes, poner en valor las singularidades de los territorios, diversificar las actividades e incrementar los intercambios económicos y sociales” aprovechando los avances del conocimiento y la innovación.
Grupos andaluces
Andalucía, como ha recordado el consejero, cuenta con un patrimonio productivo, humano, natural y cultural “enorme” y su mundo rural ha experimentado “una positiva y profunda transformación” en los últimos 25 años. A esta evolución han contribuido las actuaciones impulsadas a través de la política de desarrollo rural de la Junta de Andalucía, en la que han participado de forma activa los Grupos de Desarrollo Rural (GDR) que conforman ARA.
Entre otras acciones, se han fomentado prácticas agroambientales respetuosas con el medio ambiente, modernizado las explotaciones, mejorado los regadíos y caminos rurales, y de ha desarrollado el Programa LiderA.
“El papel que estos grupos desempeñan en la fijación de la población, el fomento de la organización y participación de la sociedad”, así como “en la reflexión y toma de decisiones sobre su propio territorio” merece “todo nuestro apoyo y entendemos que debe verse fortalecido en los próximos años”, ha recalcado Luis Planas durante su discurso.
A través del LiderA, que cuenta con la cofinanciación de la Junta de Andalucía y los Fondos Europeos, se han invertido en Andalucía desde 2009 un total de 465 millones de euros en 5.205 proyectos de carácter económico y social. En cuanto a la inversión pública, ésta ha superado los 191 millones de euros.
Como ha explicado el consejero, este montante ha promovido la inversión privada de alrededor de 275 millones de euros, un dato que pone de manifiesto “el efecto multiplicador de estas ayudas” al generarse dos euros y medio de inversión privada por cada euro de gasto público para desarrollo rural.
Atendiendo a la creación de empleo, la actuación de los GDR ha hecho posible la creación de 16.971 puestos de trabajos en este mismo período. De ellos, más de 7.000 han correspondido a mujeres.