EFE .- Tras los descensos del mes de mayo, por la salida de la carne de porcino procedente del almacenamiento privado y la tendencia a la baja alemana, que se trasladó al resto de países europeos, el porcino recupera la senda alcista.
De momento, los mataderos continúan sacrificando cerdos, con pesos cada vez más bajos, las exportaciones a terceros países se mantienen a buen ritmo y se espera un incremento del consumo.
Así, en la lonja de Mercolleida, el precio del porcino cebado, en los casos del cerdo graso, lérida y selecto gana 0,01 euros, y queda en 1,258, 1,27, 1,222 euros por kilo vivo, respectivamente, mientras que el lechón de 20 kilos repite a 19 euros en esta misma plaza.
En vacuno de carne, el mes de junio no se presenta halagüeño para este sector, que vuelve a anotar descensos en los animales de mayor peso.
La pesadez se asienta en este mercado, en el que la oferta, tal y como ya se esperaba, comienza a aumentar, mientras el consumo sigue sin mostrar un ápice de recuperación.
Hasta el momento, para mantener las cotizaciones, han sido clave las exportaciones que, en el ámbito comunitario, alcanzaron 161.122 toneladas en el primer trimestre del año, lo que supone un importante aumento del 179,8 % respecto al mismo periodo del año pasado, según los últimos datos de la Comisión Europea.
En la zona de Binéfar (Huesca), los terneros de 281/320 kilos canal caen 0,03 euros, hasta 3,52 euros, mientras que los de 321/370 kilos, ceden 0,06 euros, y se sitúan en 3,44 euros.
Las terneras con pesos comprendidos entre 221/260 kilos también pierden 0,03 euros y se quedan en 3,78 euros kilo/canal, al igual que los frisones, que se ven arrastrados por esta tendencia negativa y se sitúan en 3,36 euros.
En vacuno de leche, los primeros datos de la recién comenzada campaña láctea recogen que las entregas en el primer mes de la temporada (abril), sumaron 525.565 toneladas, ajustadas por materia grasa, un 2,3 % más que en la temporada anterior.