Los envasadores y exportadores de aceite han lamentado este martes la disminución de las exportaciones que ha experimentado el sector en 2022 (hasta un 30% en diciembre) por la subida de precio en origen que ha sufrido del producto, de un 60%, casi el doble de lo que se ha incrementado en los puntos de venta al consumidor (+35%).

Por este motivo, la Asociación Nacional de Industriales Envasadores y Refinadores de Aceite (Anierac) y la Asociación Española de la Industrias y Comercio Exportador de Aceites de Oliva (Asoliva) ha hecho un llamamiento conjunto para que todos los actores del mundo del aceite y las administraciones trabajen con el fin de que el sector español siga manteniendo su liderazgo mundial.

A través de un comunicado, estás asociaciones han recordado que en los últimos meses las exportaciones españolas han ido reduciéndose y que su volumen se redujo hasta un 30% en diciembre, según los datos registrados en el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, lo que achacan al alto precio en origen del producto.

«Esto va a seguir sucediendo en los próximos meses como consecuencia del aumento de los precios en origen de un 60%», ha dicho el director general de Asoliva, Rafael Pico, quien ha subrayado que España no se puede permitir esta pérdida de competitividad en el sector de los aceite de oliva españoles.

Los industriales, por su parte, han mostrado su preocupación ante la falta de conocimiento de la opinión pública sobre cuál es la situación real en el sector del aceite y ante los mensajes que se lanzan a los ciudadanos de contención de los márgenes comerciales para evitar una futura subida de precios en el lineal.

«Cualquiera que conozca el sector, sabe que hemos reducido nuestros márgenes de manera significativa en el último año, pero hay factores que escapan a nuestro control y que inciden en el precio final del producto», ha explicado el director de Anierac, Primitivo Fernández.

Según los datos que aportan estas dos asociaciones, tomados de los Gobiernos de los países miembros de la Unión Europea (UE), el precio en origen de compra de oliva virgen al productor subió de 3,357 euros kilogramo hasta los 5,328 euros entre la primera semana de enero de 2022 y la primera semana del mes de enero de este año.

Por otro lado, según la variación interanual del último Índice de Precios al Consumo (IPC) del aceite es del 35%.

«Estos datos oficiales son una prueba irrefutable de que la industria del aceite está haciendo un gran esfuerzo que afecta a sus márgenes comerciales y que los envasadores están poniendo todo de su parte para evitar la subida del aceite que tiene su origen en otros factores», ha señalado Fernández.

CAUSAS DE LA SUBIDA EN EL CAMPO

Para explicar estas subidas, los envasadores y los exportadores indican que, por un lado, se debe al alza de los costes que han asumido los productores debido a un «escenario macroeconómico de incertidumbre que ha elevado los precios de todos los insumos necesarios para producir oliva».

Por otro, apuntan a una escasa producción, ya que según las últimas estadísticas de la UE publicadas se aprecia una reducción de la producción europea por las condiciones del clima de un 33,8 % en 2022 respecto al año 2021.

Ambas asociaciones abundan que la preocupación ahora está en saber si la cantidad del aceite virgen extra que hay va a ser suficiente para atender al mercado interior y a los habituales mercados donde España es el principal exportador.

Además, Anierac ha mostrado su preocupación por el impacto que pueda tener en el consumo esta escalada de los precios en origen al que se suman medidas legislativas que, en su opinión, «no ayudan a trabajar en la dirección adecuada».

En ese sentido, apunta al nuevo impuesto al plástico, que consideran una «anomalía europea» ya que solo se aplica en España.

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