JARC-COAG celebra que el Parlamento catalán haya aprobado por unanimidad instar a la Generalitat a aumentar el presupuesto destinado al Departamento de Agricultura.
Los máximos representantes territoriales de JARC-COAG ya denunciaron, en una rueda de prensa el 30 de septiembre de 2016 celebrada en el marco de la 62.ª Feria Agraria de St. Miquel, que la Generalitat catalana «tenía que corregir el agravio histórico que sufre el sector agrario catalán en comparación en los presupuestos que destinan otros gobiernos».
Indicaban que desde el 2014 el Gobierno catalán aporta menos de un 1% de su presupuesto al Departamento de Agricultura, y que el porcentaje que llega directamente a los productores se sitúa aproximadamente en el 0,33%.
La organización agraria también trasladó su demanda directamente al Presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, en una reunión en la cual también participó la consejera de Agricultura, y posteriormente se reunió con miembros de todos los partidos políticos con representación parlamentaria.
¿Cuando invierten otros gobiernos en el sector agrario?
Considerando que tiene una estructura productiva similar, los representantes de JARC-COAG expusieron que el Gobierno aragonés ha destinado el 2016 un 1,7% de sus fondos a Agricultura, mientras que la Consejería Valenciana ha dirigido un 1,6%.
La entidad también comparó los datos con las de España o Francia, siguiendo la voluntad expresada por el Gobierno catalán de convertirse en un Estado. El 2016 el Ministerio de Agricultura español gestionó el 2,10% del presupuesto total del Estado y el francés un 1,6%.
Asimismo, JARC-COAG pide que se concrete cuál será el aumento del presupuesto y máxima celeridad para aplicar el incremento en las líneas de apoyo clave por los productores profesionales.
Concretamente, la entidad reitera que la Administración tendría que focalizar su esfuerzo en la incorporación de jóvenes, las inversiones productivas, las ayudas agroambientals, la producción ecológica y las indemnizaciones compensatorias por zonas con limitaciones naturales.
Los años 2012 y 2013, se denegaron por carencia de presupuesto 1.400 solicitudes de ayuda dirigidos a ejecutar una inversión. El 2014 no hubo ni convocatoria y el 2015 otro golpe se quedaron sololicitudes para cubrir. Otras ayudas, como las destinadas a la producción ecológica o en las zonas de montaña han sufrido un recorte del 20%, porque la demanda supera claramente la disponibilidad presupuestaria.
Aún así, la organización recuerda que el presupuesto no dota sólo las diferentes líneas de ayuda, y que también depende la ejecución de todas las políticas agrarias que se pretende desarrollar, y que no pueden ser atendidas adecuadamente por carencia de recursos.