La Comisión explicó que entre las personas que han estado en contacto directo con los contagiados no se ha detectado ningún síntoma anormal ni que indique la menor "relación epidémica" entre todos ellos.
Además, indicó que los enfermos han sido aislados y que aún no se ha detectado un posible contagio entre humanos.
El martes, la viceprimerministra de China, Liu Yandong, hizo un llamamiento a las autoridades sanitarias de su país para que incrementen los esfuerzos que prevengan la propagación de la cepa H7N9 de la gripe aviar.
Asimismo, añadió que tanto el presidente chino, Xi Jinping, como el primer ministro, Li Keqiang, han pedido un tratamiento cuidadoso de los infectados e intensificar los esfuerzos para combatir el virus.
Otras regiones del país, como Hong Kong y Taiwán, han extremado las medidas de precaución y llevan a cabo exámenes a pacientes sospechosos de haber contraído el H7N9, unas pruebas que, por el momento, han dado negativo en todos los casos.
El virus ya fue detectado en varios animales vivos, tanto palomas y pollos en cautividad como pájaros en libertad, mientras China trabaja en la creación de sus propias vacunas contra el virus, según ha anunciado el director de la nueva oficina de control del H7N9 de la Comisión de Sanidad de China, Liang Wannian.