La “Danza contra la violencia de género y Ofrenda Intergeneracional de semillas y plantas” que ha organizado la Federación SOL RURAL -con financiación del Instituto Andaluz de la Mujer y colaboración de Las Beguinas, El GDR Campiña de Jerez y el Ayuntamiento de La Barca-, ha tenido lugar en la Plaza de la Artesanía de La Barca concentrando a unas 100 mujeres, para mostrar su rechazo y concienciar a las nuevas generaciones en su prevención y para “sembrar semillas por la vida, por la paz y contra la violencia”, según se ha proclamado desde la Federación.
La filosofía de estos eventos ha sido reforzar el grado de implicación de este colectivo asociativo en el desarrollo integral de las mujeres, no sólo en la consecución de la igualdad, sino también en la superación de la doble exclusión de las mujeres rurales por ser mujeres y rurales, lo que se agrava aún más cuando son víctimas de la violencia de género.
Se reforzado el mensaje de “si siembras semillas de paz, cosecharás respeto y equidad”
Al acto han asistido la Presidenta de SOL RURAL, Francisca Gago; el Alcalde de La Barca, Alejandro López, así como la Presidenta del GDR Campiña de Jerez y Delegada de Medio Rural del Ayuntamiento de Jerez, Mª Carmen Collado. Ésta última ha destacado “el trabajo de este colectivo asociativo en pro de la mejora de la calidad de vida de las mujeres rurales desde hace más de dos décadas, siendo todo un referente”, y sobre todo, que “pese a ello no han decaído en su labor y siguen trabajando por el relevo intergeneracional, lo que desde el GDR seguiremos apoyando”.
Los actos programados han consistido en la lectura de unas palabras por representantes de SOL RURAL, en las que han transmitido que “la violencia que se ejerce contra las mujeres y las niñas en todo el mundo es una violación de los derechos humanos que empobrece la sociedad, genera injusticia y pone frenos al desarrollo. Es un grito contra la sana convivencia, contra la igualdad y, en definitiva, contra la libertad y la vida”. Igualmente han recalcado que “es evitable aunque para ello además de ser una responsabilidad, debe ser una verdadera prioridad a nivel político poniendo todos los medios asignando los recursos y la financiación necesaria”.
Después, se ha pasado a una actividad lúdica en la que mediante diversas danzas del mundo, dinamizadas por un experto en danzaterapia, se ha querido expresar colectivamente el rechazo contra la violencia de género; y paralelamente también ha habido una ofrenda intergeneracional de semillas, en la que se han repartido a niños, niñas y a todas las personas asistentes, plantas como símbolo de “estas nuevas raíces que tienen que crecer y que anunciar una nueva forma de vivir y de entender las relaciones entre las mujeres y los hombres, buscando vivir en la igualdad y la equidad entre unos y otros”. En definitiva, el mensaje ha sido “si siembras semillas de paz, cosecharás respeto y equidad”.