El subsecretario, Jaime Haddad, ha valorado el papel que la innovación y las nuevas tecnologías juegan en el sector agrario, ya que contribuyen a una mayor optimización de los recursos y los medios de producción, a facilitar la gestión de la explotación y a la mejora de su productividad. Unas tecnologías de la información y la comunicación, ha señalado Haddad, que la agricultura de regadío ha sido puntera en aplicar por su rentabilidad.
El subsecretario, que ha clausurado este jueves 15 la jornada APP para el regadío y la agricultura “¿Le sacas partido a tu móvil?” que, organizada por Riegos del Alto Aragón, se ha celebrado en Cuarte (Huesca), ha destacado la importancia que ha tenido la irrupción de las tecnologías de la información y la comunicación en el mundo agrario con aplicaciones como el servicio digital informativo InfoPAC, destinado a resolver consultas y dudas relacionadas con la Política Agraria Común, o el “Sistema de Información Agroclimática para el regadío” (SIAR), puesto en marcha por el Ministerio en 1998.
Las nuevas tecnologías permiten optimizar el uso del agua en el regadío y promueve su sostenibilidad económica, social y medioambiental
Este sistema, ha explicado Haddad, permite optimizar el uso del agua en el regadío, promueve su sostenibilidad económica, social y medioambiental mediante el asesoramiento a los regantes, y les facilita información agroclimática relevante y estimaciones de riego a través de diversos medios.
Por ello, el SIAR cuenta en la actualidad con 461 estaciones agrometeorológicas, de las que 361 son propiedad del Ministerio, situadas en zonas regables representativas en el territorio de doce comunidades autónomas, lo que supone una cobertura de más del 90% de la superficie de regadío española.
La aplicación de este sistema, ha recordado el subsecretario, se ha puesto a disposición de la sociedad desde junio de este año, mediante una aplicación gratuita para teléfonos inteligentes, que se puede descargar gratuitamente desde la página Web del Ministerio, permitiendo al usuario configurar el sistema de riego, visualizar gráficas del estado del suelo y activar un aviso en su terminal cuando el cultivo varía su estado de riesgo hídrico.
Además, ha añadido, la aplicación permite tener acceso a la predicción meteorológica facilitada por AEMET para los 5 días siguientes, ofreciéndose datos de predicción sobre probabilidades de lluvia, temperatura mínima y máxima o velocidad del viento.
Una herramienta, ha apuntado el subsecretario, que acumula ya más de 2.500 descargas y está siendo verificada por la experiencia de los usuarios, que también aportan observaciones y sugerencias.
Importancia de la agricultura de regadío
En su intervención Haddad ha resaltado la importancia que, desde el punto de vista de sostenibilidad económica, tiene la agricultura de regadío, ya que mantiene y mejora la competitividad agrícola, incrementa los rendimientos y garantiza las producciones, lo que redunda en la mejora de la renta de las explotaciones.
Una agricultura, ha explicado, que tiene gran presencia en España, que cuenta con la mayor superficie de regadío de toda la Unión Europea, con 3,63 millones de hectáreas regadas en 2015, lo que representa el 15% de la superficie agraria útil, aportando alrededor del 67% de la producción final vegetal.
Además de su peso económico, el subsecretario ha recordado también su repercusión como generadora de empleo, tanto de manera directa como indirecta en la industria agroalimentaria, contribuyendo a frenar el éxodo de zonas con riesgo de pérdida de población, y su papel en la sostenibilidad medioambiental mediante la gestión de los recursos hídricos de forma inteligente y con enfoque integrador.
En este sentido ha puesto en valor la labor desarrollada por las administraciones públicas y el sector en la modernización y racionalización del consumo de agua mediante el uso de las tecnologías más modernas como el riego por goteo, que han permitido reducir el consumo de agua por parte del regadío. Muestra de ello, ha puntualizado, es la disminución acumulada del consumo de agua estimada en 9.673 hm3 entre el año 2000 y el 2014, periodo en el que se ha conseguido un ahorro medio anual de 691 hectómetros cúbicos.