Los bomberos han señalado que el fuego es "incontrolable" debido a la presencia de material inflamable en la planta de la industria cárnica. Su principal temor en este momento es que las llamas alcancen un depósito de amoniaco, lo que convertiría el humo en tóxico y agravaría mucho la situación.
Así, se ha recomendado a la población residente en los lugares más cercanos que permanezca en sus domicilios con las ventanas cerradas para evitar el efecto nocivo que puedan tener los humos y gases que, procedentes de la fábrica en llamas, pudieran llegar a los barrios de Castañares, Cótar y Villafría, fundamentalmente. No obstante, la densa humareada ya ha obligado a desalojar algunas viviendas de los barrios próximos de Capiscol y Cótar.
Asombro y dolor, pero también preocupación
En el entorno de la planta, se han agolpado a lo largo de todo el día unas doscientas personas, entre ellos trabajadores y antiguos miembros de la plantilla de Campofrío, una multinacional que nació en Burgos en 1952.
Algunos miran las llamas con cara de asombro, mientras otros están llorando por el drama personal que pueda suponer para los más de mil trabajadores, dado que la planta está prácticamente destruida.
Al lugar se han desplazado el delegado territorial de la Junta de Castilla y León, Baudilio Fernández Mardomingo, y el subdelegado del Gobierno en Burgos, José María Arribas, que han rehusado hacer declaraciones por el momento.
Un "drama para mil familias"
Por su parte, el presidente del comité de empresa de Campofrío, Pablo Fraile, ha señalado que el incendio de la planta principal de la multinacional cárnica en el polígono de Villafría es "un drama para mil familia".
En un primer encuentro entre trabajadores y la compañía, se va solicitarsegún Fraile, que hagan "todo lo posible" porque la planta se vuelva a construir y "no se deslocalice" tras el incendio.
En este sentido, ha adelantado que pedirán a todas las administraciones que se impliquen para volver a poner en marcha la planta, porque "muchas familias dependen de ella".
El presidente del comité de empresa ha afirmado que intentan "mantener la calma, porque esto es una avería gorda para muchas familias". Fraile ha explicado que, aunque la planta tiene una plantilla de unos mil trabajadores, en el momento del incendio, hacia las 6:45 de esta mañana, solo había un guarda y unos pocos empleados de mantenimiento, porque no se estaba trabajando.
Ha reconocido que los bomberos han dado la planta principal por perdida porque no pueden parar las llamas y las instalaciones están completamente destrozadas.