EFE.- El conseller de Interior, Ramon Espadaler, ha explicado hoy que los bomberos tratarán de evitar el avance del fuego por el flanco nordeste hacia Tivissa, una de las principales «preocupaciones» en este momento.
Espadaler ha asegurado también que el cambio de viento a brisa marina «provoca inquietud».
Los medios aéreos afrontan unas horas decisivas en los trabajos de extinción, que se centran en el flanco de 800 metros cuadrados de entrada al barranco de Fogassos.
Los efectivos terrestres de los bomberos desplegados en la zona tienen rodeadas, según el alcalde de Tivissa, Jordi Jardí, las hectáreas que han calcinado las llamas, que a estas alturas son ya 728.
La boca del barranco de Fogassos es esencial en los trabajos de extinción, porque si el fuego, inducido por la dirección de la brisa marina, entra por esta zona, «iría directo al casco urbano de Tivissa y abriría la puerta a que ardiera una superficie mayor, de unas 2.000 hectáreas», ha apuntado Jardí.
Para ello, dos máquinas excavadoras están haciendo un cortafuego que evite que las llamas superen esta barrera.
«Estamos muy animados y psicológicamente será clave porque si ganamos esta batalla, la guerra lo estará prácticamente esta tarde», ha explicado Jardí, para quien «las horas inmediatas sin duda serán las más importantes de este incendio».