El Gobierno francés ha anunciado que citará ante el Tribunal de Comercio a la multinacional Carrefour por «prácticas comerciales abusivas contrarias a las disposiciones del código de comercio», donde planteará la posibilidad de imponer una multa civil y obligarle a frenar estas prácticas.
«Se reprocha especialmente a Carrefour que exija a sus abastecedores, sin ninguna contrapartida, un descuento complementario de distribución de un montante significativo», señaló el Ministerio de Economía.
Según el ministerio, estas prácticas quedaron demostradas durante la inspección de la Dirección General de la Represión del Fraude (DGCCRF) realizada en febrero durante la campaña anual de negociaciones entre la gran distribución y sus abastecedores.
Sobre la mesa hay una propuesta de «una multa civil» y una orden judicial «para poner fin a estas prácticas ilegales». Pocos días después de la apertura de las negociaciones comerciales en el año 2017, el gobierno también ejerce presión sobre otros minoristas, lo que indica que «varias otras tareas están previstas en las próximas semanas para detener y castigar las prácticas de muchas otras marcas».
«Los ministros no dudarán en utilizar su poder de citación si aparece importantes desequilibrios en las relaciones comerciales entre los profesionales» decir las tres inquilinos de Bercy, llamando «para las relaciones comerciales y negociaciones constructivas calmado y respetuoso de los principios de la ley».
Carrefour es el segundo distribuidor de alimentación mundial y el primero en Europa con presencia en más de 30 países, donde emplea a 380.000 colaboradores en más de 11.500 tiendas.