El reparto de estos derechos entre los viticultores se realizará mediante una convocatoria de concesión que publicada en el BON, fecha a partir de la cual, los viticultores interesados tienen un mes para presentar sus solicitudes.
Para la adjudicación se han establecido grupos de prioridad: jóvenes agricultores, explotaciones agrarias prioritarias y agricultores a título principal, por este orden, beneficiándose cada titular de un hectárea.
En último lugar podrán optar a la convocatoria el resto de viticultores, cuya actividad principal no es la agricultura, aunque la superficie máxima que pueden recibir será de 0,5 hectáreas.
Los viticultores a los que se les concedan los derechos deberán realizar la plantación de la viña antes de que finalice la segunda campaña siguiente a la de la concesión y deberán cultivar el viñedo durante al menos diez campañas, además de otros compromisos.
En caso de arranque de las viñas plantadas con derechos de nueva plantación, estos no darán origen a nuevos derechos y por lo tanto no se podrán utilizar en otras parcelas.