Ante esta situación, el ministro ha explicado que las maniobras de gestión de los embalses, principalmente en los de Yesa e Itoiz (Navarra) y Mequinenza-Ribarroja-Flix (bajo Ebro, Tarragona), permitieron reducir el caudal circulante de los ríos, evitando, por tanto, que las inundaciones fueran mayores.
Sobre los daños causados en infraestructuras hidráulicas, el ministro ha comentado que aún no se dispone de una valoración ajustada, aunque sí se sabe que las motas y defensas están resistiendo, y no parece que se vayan a registrar más daños que los de las inundaciones anteriores de finales de enero y de abril, “algunos de los cuales seguiremos reparando una vez bajen los caudales”, ha asegurado.
En este sentido, Arias Cañete ha detallado que la Confederación Hidrográfica del Ebro han finalizado, prácticamente, los trabajos de mejora de seguridad de la mota de defensa del casco urbano de Boquiñeri, afectadas por las inundaciones de enero. Estas obras de emergencia fueron autorizadas por el Gobierno el pasado mes de mayo por un importe de hasta 500.000 euros.
También ha afirmado que, cuando el caudal del río lo permita, se van a iniciar los trabajos de reparación de las motas por importe de 900.000 euros, así como la limpieza del cauce del Eje Medio del Ebro en Aragón, con un presupuesto de 450.000 euros.
Del mismo modo, Arias Cañete se ha referido a las actuaciones en Navarra y La Rioja, donde la Confederación va a reparar las motas de los municipios de Valtierra, Alfaro, Milagro, Castejón, Tudela, Arguedas, Cabanillas, Buñuel y Cortes, entre otras localidades. Según ha explicado, se van a invertir 700.000 euros, a lo que se sumarán 550.000 euros que se destinarán a la limpieza del cauce de los ríos en Castejón y Valtierra.
En total, “el Ministerio, a través de la Confederación Hidrográfica del Ebro, está invirtiendo más de 3,1 millones de euros en reparaciones de daños causados por las inundaciones de este año en la cuenca”.
En cuanto a los daños en las zonas agrícolas y ganaderas, Arias Cañete ha comentado que el Plan Anual de Seguros Agrarios Combinados de 2013 contempla líneas de aseguramiento que cubren la práctica totalidad de las adversidades climáticas que producen daños en la producción, plantación e infraestructuras.
En el caso de la Comunidad Foral de Navarra, el nivel de implantación del seguro agrario es bastante elevado. Así, en 2012, el año de mayor siniestralidad en la historia del seguro agrario en España, las indemnizaciones que percibieron los agricultores y ganaderos navarros asegurados fue de más de 36 millones de euros.
A este respecto, el ministro ha asegurado que se comenzarán las peritaciones de las inundaciones en cuanto se pueda acceder a las fincas y tras la recepción del correspondiente parte de siniestro. Luego, en la medida de lo posible, “agilizaremos las compensaciones a agricultores y ganaderos afectados, conforme a los seguros contratados”, ha concluido.