EFE.- El calor y la humedad de las últimas semanas han influido negativamente en la cosecha, que en un principio se preveía mejor que el año anterior, según el presidente de la Cámara Arrocera del Montsià, Miquel Fàbregues.

A su juicio, hasta el pasado mes de agosto se preveía superar la cosecha del año anterior, pero las altas temperaturas han afectado la etapa final del cultivo, que coincide con el momento en que se espiga y cuaja el grano, hecho que supondrá algunas perdidas en una campaña considerada, en un inicio, como "buena".

Los agricultores han empezado la siega del arroz en los primeros campos que fueron inundados, en el mes de abril, y también en aquellos donde se cultiva una variedad de arroz de maduración más rápida, como es el caso del arroz bomba.

Las cámaras arroceras apuestan por fomentar el cultivo de esta variedad de arroz que está ganando aceptación en el mercado.

Así, se estima que un 5 por ciento del arroz cultivado en el Delta es de la variedad bomba, un porcentaje que se prevé que aumente en los próximos años debido a la popularidad que está adquiriendo este arroz en la gastronomía española.

Para Fàbregues, cada vez se amplía más el mercado que busca un producto de más calidad y, además, "esta variedad garantiza el éxito en la cocina". "Se suele utilizar este arroz en las paellas porque no se pasa", asegura Fàbregues.

El presidente de los Arroceros del Delta del Ebro, Jordi Casanova, reconoce que en los próximos años deberán estar atentos a la oferta y a la demanda para no colapsar el mercado ya que en los últimos tiempos "ha bajado el consumo de arroz per cápita ya que también cambian los hábitos y la gente cada vez tiene menos tiempo para cocinar".

El arroz bomba se paga tres veces más caro que las otras variedades de arroz tradicional. Sin embargo, su cultivo requiere más cuidado porque el grano se desprende con más facilidad de la espiga y este hecho puede significar riesgo de pérdidas para el agricultor.

En concreto, Arroceros del Delta del Ebro, cooperativa instalada en Deltebre, prevé recolectar entre 38 y 40 millones de kilos de arroz en una campaña marcada por la preocupación por la plaga del caracol manzana que afecta al hemidelta izquierdo del delta.

×