La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos –COAG de Andalucía ha hecho balance de la campaña atípica de aceituna de mesa de este año, que se encuentra a punto de finalizar y que se ha caracterizado por “un verdeo atípico con claros y oscuros”, refiriéndose a los factores que han marcado esta campaña fuera de lo común: la pandemia del COVID, la meteorología y la ley de cadena alimentaria.
Antonio Rodríguez, responsable de Aceituna de Mesa de COAG Andalucía, ha destacado que la campaña empezó a primeros de septiembre, “veinte días antes de lo normal por las condiciones climáticas. Y es que tuvimos una primavera que adelantó la floración del fruto en los olivos, tal y como ha ocurrido en otros cultivos, como en viñas, girasoles, etc”.
Asimismo, comenta el responsable de Aceituna de COAG Andalucía, “empezamos con mucha incertidumbre con el tema covid’19 que, afortunadamente, con el trabajo profesional de agricultores y demás componentes del sector, no ha tenido apenas incidencia, por lo que se ha podido hacer una recolección casi normal en el apartado sanitario”.
En cuanto al factor meteorológico que ha marcdo esta atípica campaña, señala que con la sequía que se está soportando desde hace varios años, con un déficit hídrico importante, ha mermado la producción en torno a un 20%.
En este sentido, recordar que COAG adelantó un aforo de toda España por debajo de las 500.000 toneladas a principios de julio, mientras que Interaceituna y la Junta de Andalucía dieron en septiembre un aforo por encima de 540.000 toneladas.
Antonio Rodríguez ha explicado además que, por variedades, “la manzanilla está un poco por debajo de la media de los últimos diez años, la gordal un poco menos, y la hojiblanca, aunque todavía no se ha acabado la recolección, apunta a una importante disminución. Otras variedades están muy por debajo de la media”.
El otro factor que ha tenido su repercusión en esta atípica campaña de 2020 es el relacionado con la reforma de la ley de la cadena de valor. “COAG está de acuerdo con que sea obligatoria la referencia a coste de producción –asegura Rodríguez-, pero ha tenido una aplicación irregular, por lo que hemos pedido a AICA que se cumpla la ley”.
PRECIOS Y ARANCELES DE EEUU
Según el responsable de Aceituna de Mesa, los precios que han recibido los agricultores en esta campaña atípica no han reflejado los costes de producción. “Esto ha ocurrido, por ejemplo, con la hojiblanca, que se ha pagado entre 40 y 60 céntimos de euro/kg. En las variedades manzanilla y gordal se empezó la recolección por debajo de coste, subiendo al final con una media de 70 a 95 céntimos la manzanilla, y entre 80 y 1,10 euros la gordal”.
Hay que destacar que COAG ha propuesto a Interaceituna la implantación del contrato tipo, con referencia a coste de producción, un objetivo de la Extensión de Normas actual, así como estudios de costes de producción para todas las variedades y modo de cultivo: manual, mecanizada, riego, secano, etc. Así mismo, esta propuesta se le ha hecho llegar al Ministerio de Agricultura y a la Consejería de Agricultura.
Por otro lado, se encuentra el problema de los aranceles de Estados Unidos, que son muy negativos para el sector: “Esperamos que Europa, junto con el Gobierno de España, negocie la retirada de estos aranceles ahora que tenemos la sentencia favorable de la OCM sobre Boing, y poder resolver lo antes posible este asunto”, dice Antonio Rodríguez.
Sobre las importaciones, el responsable de Aceituna de Mesa afirma que “hemos solicitado al Ministerio de Agricultura la modificación de la norma de calidad de la aceituna de mesa actual, para que sea obligatorio la variedad y el país de origen donde se produzcan las aceitunas. Demandamos que esté reflejado en todos los envases con letras claras, que se ofrezca buena información a los consumidores. Y es que la industria y la distribución no apuestan por la calidad, sólo hay que ver la demanda judicial contra las IGPs Manzanilla y Gordal de Sevilla y que en los lineales de la distribución es muy difícil ver el logo de ‘Aceituna de España”.
Por último, Rodríguez insiste en que “en COAG apostamos por la calidad, no por la cantidad. No se puede competir contra países como Egipto que ya son una potencia en producción, pero muy lejos de nuestra calidad”.