De hecho, el aceite de oliva ha sido elegido por la UE como producto piloto para ensayar la forma de calcular y comunicar al mercado la huella ambiental de los productos, a través de una iniciativa denominada "Single market for green products". Para ello ha puesto en marcha un proceso transparente y participativo en el que cualquier parte interesada puede expresar su opinión al respecto y que deberá concluir con la Regla de Categoría de producto del Aceite de Oliva.
De forma paralela a la constitución de la secretaría técnica del equipo de trabajo, la Universidad de Córdoba ha acogido hoy una sesión con “skateholders”, es decir con empresas y diferentes agentes del sector interesados en participar en el proceso que permitirá marcar las pautas del futuro ecoetiquetado, llamado a convertirse en una ventaja competitiva.