MARM.-Las obras de este camino natural han consistido principalmente en la limpieza de la traza, la reparación del firme, la iluminación de los túneles, y la mejora del cerramiento
Para facilitar su recorrido, el camino cuenta con dos viaductos, una pasarela, un paso superior del ferrocarril, tres túneles, nueve áreas de descanso, y seis miradores; además de dos antiguas estaciones que han sido acondicionadas como hoteles
El Ministerio de Medio Ambiente, y Medio Rural y Marino ha puesto de nuevo en servicio el Camino Natural de La Val de Zafán, una senda de 30 kilómetros de longitud en la provincia de Teruel, tras la finalización de las obras de mejora y mantenimiento efectuadas en su recorrido, en las que el Ministerio ha invertido 124.838 euros.
Las obras de este camino natural, que discurre por el trazado ferroviario en desuso de la línea La Puebla de Híjar-Tortosa, han consistido principalmente en la limpieza de la traza y de las cunetas, así como en la retirada de material desprendido, a través desbroces manuales y rozas mecanizadas.
Asimismo, se ha reparado el bacheado del firme del camino, se han mejorado las protecciones y contenciones de taludes, y se han reparado los muros de hormigón dañados. Además, se han mejorado los cerramientos, se ha instalado una balaustrada de madera, y se ha reparado la iluminación de los túneles, instalándose luminarias y otros elementos.
El Camino Natural de La Val de Zafán discurre por la Comarca del Matarraña, enlazando los municipios de Valjunquera, Valdetormo, Torre del Compte, Valderrobres, Cretas y Lledó (Teruel), y el municipio de Huerta de San Juan (Tarragona), a través de un recorrido en el que predominan los cerros y valles estrechos, alternándose los paisajes agrícolas netamente mediterráneos, con presencia de olivar y almendros, con bosques en los que predominan los pinos. En los últimos metros, en las inmediaciones del río Algar y frente a la cadena montañosa de los Puertos de Beceite, es frecuente la presencia de viñedos.
Para facilitar su recorrido, el camino cuenta con dos viaductos, el del Matarraña y del Algars; una pasarela; un paso superior del ferrocarril, que se recuperó con un nuevo puente encima del antiguo; y tres túneles, de los que dos están iluminados con un doble sistema de pulsación automática. Asimismo, en el recorrido hay habilitadas nueve áreas de descanso y seis miradores, además de dos antiguas estaciones que han sido acondicionadas como hoteles (Torre del Compte y Arnés-Lledó).
Desde 2009, la Dirección General de Desarrollo Sostenible del Medio Rural del MARM ha efectuado el mantenimiento de 25 Caminos Naturales situados en la zona Norte de España, dentro del Programa Caminos Naturales y encuadrado en el Plan Español para la Dinamización de la Economía y el Empleo, con el objetivo de ayudas a los promotores con escasos recursos económicos para afrontar determinados mantenimientos extraordinarios.
El mantenimiento de los senderos y las vías verdes persigue conservar su uso turístico y deportivo (peatonal, ciclista y no motorizado), facilitando a los usuarios la aproximación a los diferentes elementos de interés natural de la zona, tanto desde un punto de vista de educación ambiental, como de ocio y cultura.