El 98% de los municipios de Castilla y León, con sus correspondientes unidades veterinarias, tienen cebaderos calificados frente a enfermedades como la tuberculosis y la brucelosis bovina. La Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural ha publicado este lunes 22 en el Boletín Oficial de Castilla y León (Bocyl) la nueva relación de los municipios y unidades veterinarias calificados para la tuberculosis y la brucelosis en la especie bovina en la Comunidad. Es decir, un 98% de los municipios de Castilla y León tienen todos sus cebaderos con libertad de movimientos en relación al ganado bovino.
Esta publicación, que se hace con la base de los resultados a 31 de diciembre de 2019, permite la incorporación de nuevos territorios al máximo estatus sanitario frente a tuberculosis llegando el número de cebaderos calificados a ser más del 90% de los ubicados en Castilla y León.
Según la Consejería, este hecho adquiere mayor trascendencia ante la apertura de varios mercados de países terceros a bovinos vivos, dado que algunos de estos países solo permiten la exportación con origen en cebaderos calificados.
Esta resolución de la Consejería pone de manifiesto el buen estatus sanitario de la cabaña ganadera bovina ya que 88 de las 103 unidades veterinarias en las que se encuentra dividida Castilla y León tienen la totalidad de su territorio calificado frente a tuberculosis y brucelosis bovina y 2.216 de los 2.248 municipios de la Comunidad están calificados.
Esto ha supuesto una ventaja competitiva muy importante a la hora de exportar animales vivos, dado que los terneros de los cebaderos localizados en los municipios calificados de Castilla y León no requieren pruebas previas a la exportación y esto permite, entre otros movimientos, el llenado del famoso ‘barco’ sin ninguna restricción sanitaria.
Así, desde el 1 de enero de 2017, se pasó de tener un 47% de los cebaderos calificados en Castilla y León a un 80 % en 2018 y un 90% en la actualidad. Es decir, en estos momentos más del 90 % de los cebaderos de la Comunidad pueden realizar movimientos tanto a otros países de la Unión Europea como a terceros países, lo que supone una ventaja competitiva fundamental para el mantenimiento del precio en el sector bovino.
(Fotos: Archivo)