EFE.- Según un estudio elaborado en mayo entre 951 vascos por el Gabinete de Prospección Sociológica del Ejecutivo autonómico, la mayoría de la sociedad tiene algún tipo de conducta respetuosa con el medio ambiente de forma habitual.
Así, de manera cotidiana el 78 % camina, va en bicicleta o en transporte público en su localidad, el 75 % usa los puntos limpios o llama al Ayuntamiento para deshacerse de electrodomésticos, el 64 % trata de limitar el consumo de agua y el 48 % hace lo mismo con la calefacción y el aire acondicionado.
Sin embargo, los hábitos de consumo sostenibles son menos frecuentes: el 42 % compra habitualmente productos reciclados, el 31 % productos poco envasados y el 19 % ecológicos.
En cuanto al compromiso con el reciclaje, la inmensa mayoría de los vascos (83 %) separa todos o casi todos los residuos, frente al 13 % que sólo separa alguno y el 3 % que no recicla ningún residuo y alega para ello la falta de espacio.
Además, el 75 % considera que debería ser obligatorio separar los residuos, pero sólo un 27 % ve necesario sancionar a quien no lo haga.
De manera general, nueve de cada diez vascos creen que las políticas de protección medioambiental deben potenciarse o mantenerse a pesar de la crisis y sólo el 4 % preferiría reducirlas.
El informe también desvela que casi siete de cada diez vascos apuestan por potenciar las energías solar, eólica e hidráulica y algo más de cinco de cada diez creen que los riesgos de las centrales nucleares son mayores de lo que se dice.
Con respecto a Garoña, el 62 % defiende su cierre, frente al 20 % que prefiere su mantenimiento y el 19 % al que le resulta indiferente.
Sobre la técnica de extracción de gas mediante fracturación hidráulica (fracking), el estudio concluye que el 58 % ni siquiera ha oído hablar de ella. Del resto, la mitad (53 %) la rechaza, el 9 % está a favor y el resto no se posiciona.