La Guardia Civil investiga a una familia de ganaderos de El Real de la Jara (Sevilla), uno de cuyos miembros ha sido detenido acusado de abandono de animales y daños en vías públicas y fincas ajenas a su propiedad, donde liberaraban a sus animales para obtener un aprovechamiento de la montanera y pastos de forma ilícita.
Los investigados se enfrentan a cargos por delitos continuados contra el patrimonio, además de lesiones y amenazas, según ha informado este viernes el instituto armado en un comunicado, en el que asegura que el sector de la ganadería en Almadén de la Plata (Sevilla) ha sufrido cuantiosas pérdidas económicas.
La cría del cerdo ibérico de bellota, motor económico de la Comarca de la Sierra Morena de Sevilla, ha sido la más afectada y se están investigando también otros hechos en las provincias de Huelva y Badajoz.
Los investigados poseen más de 40 denuncias por abandono de animales y daños en vías públicas y fincas ajenas a su propiedad, según detalla la nota.
LA FAMILIA LLEVABA SU GANADO A FINCAS AJENAS, DONDE LIBERABA A LAS RESES PARA OBTENER EL APROVECHAMIENTO DE LA MONTANERA Y PASTOS DE FORMA ILÍCITA
Los hechos ocurrieron durante los pasados meses de noviembre y diciembre, cuando se tuvo conocimiento de que un numero indeterminado de vacas de la raza Retinta-Limusina, marcadas a fuego con la letra «G», estaban invadiendo las fincas de pequeños ganaderos del lugar, alimentándose de «montanera» (bellota caída de las encinas y alcornoques) y pastos.
Además, estaban causando graves daños en las mallas ganaderas, unos hechos que coincidieron con numerosos avisos recibidos por usuarios de las vías de comunicación entre las localidades de Almadén de la Plata, El Real de la Jara, y Santa Olalla del Cala sobre el avistamiento de reses obstaculizando dichas carreteras, con el consecuente peligro que ello ocasionaba.
La Guardia Civil de Almadén de la Plata puso en marcha entonces la denominada Operación Montanera y recabó información para averiguar la titularidad de estos animales, además de realizar inspecciones oculares en las fincas afectadas y otras diligencias de investigación que facilitaron la detención e investigación de los miembros de esta familia ganadera.
Al parecer, la citada familia llevaba su ganado a fincas ajenas, donde liberaba a las reses con el fin de obtener el aprovechamiento de la montanera y pastos de forma ilícita, y actuaba de forma amenazante contra los ganaderos de la zona cuando les recriminaban dichas conductas.
Llegaron incluso a causar lesiones de diversa consideración a uno de los ganaderos, a los que amenazaban para tratar de evitar que interpusieran la correspondiente denuncia.
PERJUICIO AL CERDO IBÉRICO: LOS INSPECTORES NO PODÍAN VERIFICAR LA SUFICIENTE CANTIDAD DE BELLOTA EN LAS DEHESAS
Los ganaderos de las localidades afectadas han valorado las perdidas económicas en más de 30.000 euros sólo durante el año 2020.
A estas pérdidas se suman los graves perjuicios para el sector del cerdo ibérico, ya que los inspectores de las empresas certificadoras de calidad no podían verificar «la entrada en montanera», es decir, la existencia de suficiente cantidad de bellota en las dehesas por cada unidad de cabeza de ganado, lo que impediría certificar la pureza del cerdo ibérico de bellota.
Hasta el momento ha sido detenido al principal acusado, a quien le han sido retiradas cautelarmente la licencia de armas y tres escopetas mientras se instruye la causa por la conducta amenazante contra los ganaderos perjudicados. Asimismo, se está investigando a la mujer e hijo del detenido por los mismos hechos.
El juez titular del Juzgado Único Mixto de Cazalla de la Sierra, ha acordado, entre otras medidas cautelares, el pago de una fianza para sufragar las pérdidas económicas producidas por el ganado y una orden de alejamiento hacia uno de los ganaderos afectados.
Asimismo, se le obliga a estabular debidamente el ganado de su propiedad, sin posibilidad de que este pueda abandonar el recinto habilitado para ello.