EFE.- El presidente de GENA, Rafael Yus, ha explicado a Efe que lo ocurrido responde al patrón de "un incendio típico de zona de coníferas", en el que "con relativa facilidad" se puede recuperar pronto el matorral asociado al pinar, pero para ello es necesario que el próximo invierno no se produzcan una fuerte erosión y la pérdida del suelo.

Por ello, ha reclamado al Gobierno andaluz una rápida actuación sobre el firme del monte y los cauces de los arroyos que existen en la zona afectada, con la finalidad de evitar un excesivo arrastre de sedimentos.

En este sentido, ha solicitado la colocación de barreras de contención en los arroyos para frenar posibles avenidas de sedimentos y controlar en la medida de lo posible la erosión del suelo.

Según Yus, esta debe ser la actuación prioritaria y posteriormente, dejar que el monte se regenere por sí solo.

"En este tipo de situaciones, estamos acostumbrados a escuchar a las administraciones decir que en un año se acometerá una reforestación y todo estará igual, pero eso es una barbaridad como la copa de un pino porque no hay que empeñarse en plagar el monte de árboles, máxime si no existe suelo para esos nuevos árboles", ha argumentado.

Ha declarado que para devolverle a la sierra el aspecto que tenía antes del incendio se necesita un tiempo más prolongado "y dejar que la oleada de matorral y arbusto que vaya creciendo posibilite la aparición de los árboles".

GENA acusó el domingo a las autoridades locales y autonómicas del incendio por permitir la construcción de urbanizaciones dispersas, en las que se generó el fuego, "fuera del casco urbano", en una zona "de difícil acceso y con abundante vegetación forestal".

El alcalde de Cómpeta, José Luis Torres, ha afirmado frente a las críticas de los ecologistas que esas urbanizaciones son "completamente legales" y que poseen sus planes de autoprotección que han evitado daños mayores sobre las viviendas.

Según Yus, está claro que esas cosas son legales "porque el Ayuntamiento se ha empeñado en que lo sean, pero nosotros lo que criticamos es que se hayan permitido esas urbanizaciones dispersas, de baja densidad, rodeadas de vegetación y entre el parque natural y el casco urbano".

"No se puede permitir que entre el Parque Natural de las Sierras de Tejeda, Almijara y Alhama y el casco urbano de Cómpeta exista ese combustible que son esas urbanizaciones dispersas", ha añadido.

El incendio, que se detectó sobre las 13.00 horas del domingo, obligó al desalojo preventivo de hasta 150 viviendas, ha afectado a una superficie aproximada de 200 hectáreas y ha quedado controlado a las 8.00 horas de hoy.

EFE.- El presidente de GENA, Rafael Yus, ha explicado a Efe que lo ocurrido responde al patrón de "un incendio típico de zona de coníferas", en el que "con relativa facilidad" se puede recuperar pronto el matorral asociado al pinar, pero para ello es necesario que el próximo invierno no se produzcan una fuerte erosión y la pérdida del suelo.

Por ello, ha reclamado al Gobierno andaluz una rápida actuación sobre el firme del monte y los cauces de los arroyos que existen en la zona afectada, con la finalidad de evitar un excesivo arrastre de sedimentos.

En este sentido, ha solicitado la colocación de barreras de contención en los arroyos para frenar posibles avenidas de sedimentos y controlar en la medida de lo posible la erosión del suelo.

Según Yus, esta debe ser la actuación prioritaria y posteriormente, dejar que el monte se regenere por sí solo.

"En este tipo de situaciones, estamos acostumbrados a escuchar a las administraciones decir que en un año se acometerá una reforestación y todo estará igual, pero eso es una barbaridad como la copa de un pino porque no hay que empeñarse en plagar el monte de árboles, máxime si no existe suelo para esos nuevos árboles", ha argumentado.

Ha declarado que para devolverle a la sierra el aspecto que tenía antes del incendio se necesita un tiempo más prolongado "y dejar que la oleada de matorral y arbusto que vaya creciendo posibilite la aparición de los árboles".

GENA acusó el domingo a las autoridades locales y autonómicas del incendio por permitir la construcción de urbanizaciones dispersas, en las que se generó el fuego, "fuera del casco urbano", en una zona "de difícil acceso y con abundante vegetación forestal".

El alcalde de Cómpeta, José Luis Torres, ha afirmado frente a las críticas de los ecologistas que esas urbanizaciones son "completamente legales" y que poseen sus planes de autoprotección que han evitado daños mayores sobre las viviendas.

Según Yus, está claro que esas cosas son legales "porque el Ayuntamiento se ha empeñado en que lo sean, pero nosotros lo que criticamos es que se hayan permitido esas urbanizaciones dispersas, de baja densidad, rodeadas de vegetación y entre el parque natural y el casco urbano".

"No se puede permitir que entre el Parque Natural de las Sierras de Tejeda, Almijara y Alhama y el casco urbano de Cómpeta exista ese combustible que son esas urbanizaciones dispersas", ha añadido.

El incendio, que se detectó sobre las 13.00 horas del domingo, obligó al desalojo preventivo de hasta 150 viviendas, ha afectado a una superficie aproximada de 200 hectáreas y ha quedado controlado a las 8.00 horas de hoy.

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