En un comunicado, la agrupación ecológica explicó que la protesta tenía como objetivo denunciar a los senadores por eludir "su responsabilidad de impedir la siembra de maíz transgénico" en el país y poner en riesgo un grano básico para la alimentación de los mexicanos.
Greenpeace demandó a los senadores modificar la Ley de Bioseguridad de Organismos Genéticamente Modificados "para reinstalar la moratoria para siembras de maíz transgénico en México" tanto en programa piloto como a nivel comercial.
Además, solicitó la inspección de las importaciones de maíz genéticamente modificado de países que lo cultivan comercialmente y adoptar medidas para reducir las probabilidades de que en México se siembre el grano transgénico sin autorización.
J unto a otras ONG, Greenpeace solicitó en marzo pasado al presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, que rechazara las solicitudes de varias trasnacionales agroquímicas que buscan impulsar la siembra de maíz transgénico a nivel comercial.
Además, pidieron a la Comisión Nacional de Derechos Humanos que girara las medidas cautelares para que el Gobierno federal se abstenga de otorgar dichos permisos.
De acuerdo con los activistas, en septiembre de 2012 compañías como Monsanto, Pioneer y Dow AgroSciences solicitaron los permisos para cultivar este grano transgénico.
México es uno de los principales productores del mundo de maíz blanco con el que se elabora la tortilla -base de la alimentación de los mexicanos- y compra del exterior más de siete millones de toneladas anuales del amarillo, con usos pecuarios e industriales.
El ministro mexicano de Agricultura, Enrique Martínez, dijo en fecha reciente que el Gobierno federal determinará este año si aprueba o rechaza la siembra comercial de maíz transgénico, y aclaró que la decisión dependerá del estudio que desarrollan diversas instituciones científicas.
"Esperaremos hasta tomar una decisión muy sustentada porque sabemos que es un tema polémico y nuestra intención es cumplir con todos los protocolos internacionales", señaló entonces el funcionario.
Durante una visita a México en marzo de 2012, el relator especial de la ONU sobre Derecho a la Alimentación, Olivier de Schutter, pidió al Gobierno declarar una moratoria para los cultivos experimentales de maíz transgénico para evitar que contamine a las variedades autóctonas.
México cuenta con 59 especies y 200 variedades adaptadas de maíz, usado antiguamente por diversos pueblos y culturas mesoamericanas, como los olmecas y los aztecas.