EFE.- Asden, a través de un comunicado, señala que hasta la fecha las confederaciones hidrográficas del Duero y del Ebro han ejercido de manera "insuficiente" sus funciones de policía ambiental, como lo demuestran, a su juicio, que entre 2006 a 2011 la del Ebro tan sólo ha incoado dos expedientes graves y la del Duero sesenta en seis años, a pesar de las denuncias interpuestas.
El portavoz de ASDEN, Carlos González, ha subrayado hoy a Efe que la oposición de la sociedad soriana a los proyectos de fractura hidráulica que se tramitan en la actualidad en la provincia -cinco-, se sustenta en la afección de este método extractivo de gas natural a las aguas subterráneas.
También se ha referido a la falta de voluntad que, a su juicio, han demostrado las confederaciones en las últimas tres décadas para ejercer sus funciones de control, vigilancia y sanción.
"Sin salirnos del ámbito de la provincia de Soria, existen numerosos antecedentes de cómo las confederaciones hidrográficas han transigido con el deterioro de las aguas y del dominio público hidráulico", ha denunciado.
En este sentido ha señalado que las perspectivas de la actuación futura de las confederaciones hidrográficas no son nada halagüeñas en el caso que prosperen los permisos de investigación sobre fractura hidráulica.
Por un lado, los recortes económicos han menguado los recursos humanos, materiales y económicos de las administraciones medioambientales, y por otro se detecta una voluntad generalizada de los gobiernos de "relajar" aún más el cumplimiento de las normativas medioambientales.
"Es difícil que en esta coyuntura, las confederaciones hidrográficas velen eficazmente por el cumplimiento de la legalidad en materia de calidad del agua, máxime cuando enfrente se encuentran con un sector con elevada capacidad de influencia a nivel político, económico y de medios de comunicación, como es el sector de las petroleras", ha concluido.