Tras muchos ofrecimientos solidarios de empresas y destilerías, el Gobierno ha decidido permitir el uso especial de bioetanol, un alcohol de origen vegetal cuya utilización se encuentra en revisión, para la producción de geles hidroalcohólicos desinfectantes de manos.
El Boletín Oficial del Estado (BOE) publica este sábado 4 una orden del Ministerio de Sanidad en el que se especifican las medidas especiales para utilizar bioetanol en estas soluciones, con el objetivo de hacer frente a la gran demanda de estos productos de desinfección de manos que ayudan a prevenir posibles contagios por coronavirus.
Los geles y soluciones hidroalcohólicos cuentan con concentraciones de alcohol puro o etanol superiores al 70% y Sanidad ha tomado esta medida excepcional para evitar el desabastecimiento de etanol.
Una decisión que cuenta desde el 20 de marzo con el respaldo de la Unión Europea, ya que el bioetanol está en periodo de revisión para su uso como «biocida».
El bioetanol es, según explica el BOE, «el alcohol etílico o etanol obtenido a partir de la fermentación de los azúcares que se encuentran en diversos productos vegetales, tales como cereales, remolacha, caña de azúcar o biomasa».
La orden de Sanidad detalla las especificaciones del uso del bioetanol para la fabricación de los citados geles desinfectante.
un ofrecimiento de muchas empresas y una petición del sector
Han sido numerosas empresas que habían pedido autorización para poder aplicar estas medidas, así como por parte del sector. De hecho, Unión de Uniones de Agricultores y Ganaderos había señalado al sector vitivinícola como uno más de los que van a verse afectados por la crisis sanitaria y propone que se puedan usar los mecanismos de destilación para alcohol sanitario y producir geles desinfectantes y poner en marcha la vendimia en verde de forma que el impacto generado ahora por el coronavirus pese menos en la próxima campaña.
Unión de Uniones se puso en contacto con el Ministerio de Agricultura para presentarle líneas de acción que ayudarían al sector vitivinícola a reducir las consecuencias negativas del cierre del canal HORECA así como la cancelación de eventos y ferias de promoción y la reducción en la exportación, al tiempo que se cubren algunas necesidades evidenciadas durante la pandemia.
La organización propone al MAPA – y también lo ha planteado al Ministerio de Sanidad – que las destilaciones voluntarias para industria o sector energético que contempla el reglamento de la UE para regular la oferta (Reglamento (UE) 1308/2013), sean destinadas a alcohol sanitario, dada la gran emergencia que ha provocado el COVID-19.
Así, pide que se implemente el artículo 216 de dicho reglamento que justifican los pagos nacionales para la realización de una destilación de vino solidaria y que comunique a la Comisión esta actuación. También considera que se podría aprovechar ya el alcohol obtenido en el marco de la medida de destilación obligatoria de los subproductos de la transformación del vino.
Es triste que las farmacias estén sin alcohol en la nación que tiene mas vino, del cual algunas cantidades pueden ser destiladas, para ayudarnos a combatir esta epidemia, con el gobierno que tenemos como se empeñe falta alcohol como en Venezuela falta petróleo.