Las autoridades danesas comenzaron este lunes 28 a erigir una alambrada en la frontera con Alemania para prevenir la propagación de la fiebre porcina africana en su territorio.
La alambrada, de 70 kilómetros de largo, tendrá una altura de un metro y medio e incluirá aperturas permanentes en los puntos de cruce de la frontera del área Schengen y donde coincida con zonas de intersección con grandes vías fluviales.
Se espera que el proyecto, con un coste estimado de 80 millones de coronas danesas (10,7 millones de euros), esté finalizado el próximo otoño.
Esta iniciativa forma parte de una serie de medidas aprobadas en junio por el Parlamento danés como protección al sector porcino nacional, uno de los más potentes de Europa, y para eliminar el jabalí de Dinamarca.
Dinamarca ha intensificado además la lucha contra el jabalí en zonas privadas y estatales y aumentado las multas para transporte de animales que no cumpla las normas de limpieza.
«Tenemos miles de razones para hacer lo posible para impedir que la fiebre porcina africana llegue a Dinamarca y ahora podemos erigir la alambrada. Con ella y con nuestra caza al jabalí queremos romper la cadena de contagio y reducir el riesgo», señaló en un comunicado el ministro de Agricultura, Jakob Ellemann-Jensen.
La industria porcina danesa exportó en 2016 por valor de 30.000 millones de coronas (algo más de 4.000 millones de euros), de los que casi dos tercios fueron a países de la Unión Europea, según datos oficiales.
Cabe recordar que hace unos días, el ministro francés de Agricultura, Didier Guillaume, confirmaba que se va a crear un vacío sanitario en una franja de la frontera de Francia con Bélgica en la que se van a matar todos los jabalíes para impedir la llegada de la peste porcina que se ha detectado en el país vecino.
La fiebre porcina africana -de alta mortalidad entre cerdos y jabalíes pero inofensiva para humanos y otros animales- se ha extendido el último año por varios países del Este de Europa como Letonia, Lituania, Estonia, Polonia y la República Checa.