Los fabricantes asociados a Asemac, según señalan en un comunicado, conforman un sector alimentario moderno, sometido a los más estrictos controles legales, higiénicos y sanitarios de toda la cadena de valor, por encima de las exigencias de los organismos públicos que velan por la seguridad alimentaria.
Precisamente, estas innovaciones aplicadas por la industria y el uso de la tecnología del frío ha hecho posible el trasladar el método de elaboración tradicional del Roscón de Reyes al modo de producción moderno, sin restar un ápice de calidad, pero abaratando considerablemente el coste de producto. La campaña de producción de este dulce navideño se inicia en las empresas semanas antes, para lograr surtir los puntos de venta de más de 10 millones de roscones de manera puntual y eficaz y facilitar su comercialización en los dos días en los que se producen la mayoría de las solicitudes.
El sector representado en Asemac se ha adaptado con eficacia a los parámetros marcados por los diferentes puntos de venta existentes en el mercado, los cuales a su vez responden a los nuevos hábitos de consumo, actitudes y necesidades de la población actual.
La gran distribución demanda, en una tendencia creciente en los últimos años, Roscones listos para descongelar y consumir; sin embargo, el canal tradicional sigue apostando por el Roscón crudo, preparado para fermentar, hornear y personalizar en el establecimiento. En general se puede decir que la tipología de Roscón que más solicita el consumidor final es la tradicional receta, con relleno, en formato de 1 y 1/2 kilo y a un precio medio de entre 8 y 10 euros el kilo.
El presidente de Asemac, Felipe Ruano, señala que “los procedimientos aplicados por la industria permiten reducir la inversión en equipamiento y la labor del personal destinado al acabado del producto en el punto de venta, a la vez garantizan que el consumidor reciba un Roscón de Reyes de calidad superior, con el sabor y la textura tradicional y un acabado `recién hecho´ a cualquier hora del día y todo ello al menor coste posible”.