Tere Antón Díaz / Presidenta de Amfar Alicante
Este 15 de octubre, se nos presenta la mejor ocasión para concienciar de la importancia real que tiene la Mujer Rural y lo necesaria que es en la explotación y la empresa familiar agraria. Todas nosotras luchamos cada día (llueva, haga calor o frío, sea laborable o festivo) por nuestro entorno y modo de vida. Planificamos los cultivos, sembramos, regamos, labramos la tierra y desarrollamos, incluso, las funciones de contabilidad y gestión de la empresa. La aportación que realizamos en las pedanías es tan importante que podríamos decir que nosotras solas representamos las dos patas de una mesa.
Fácil, cada vez lo tenemos menos. Somos conscientes de que las cuencas de España se sitúan por debajo de los límites deseados. Sufrimos el problema hídrico y el de los bajos precios en origen. La escasez que padece la provincia dificulta que podamos desarrollar nuestras plantaciones tal y como podríamos si contáramos con los recursos hídricos suficientes. Los kilos de frutas y hortalizas que conseguimos son menos, mientras que el agua, como el resto de los productos agrarios como las semillas, son año tras año más caros.
Pese a todas las dificultades, la inestimable contribución que realizamos para el desarrollo y la protección del medio ambiente es evidente. Las mujeres tenemos una gran capacidad para gestionar la casa, la empresa y para abordar problemas medioambientales. Tomamos decisiones sobre el uso de los recursos y las inversiones priorizando el interés y bienestar de nuestros hijos, familias y, al final, de comunidades enteras.
Alimentamos, con los cultivos, leche y carne que obtenemos, a toda Europa y, por supuesto, a nuestros hijos. Somos el Sector Primario y poco se nos valora y reconoce. Además de trabajar en el campo, las mujeres rurales llevamos la casa, sacamos la familia adelante. No comprendo como todavía sigue diciéndose “no trabaja, es ama de casa”. ¡Con el tiempo y dedicación que conlleva hacerlo y la importancia que estas tareas tienen!
Así, si en la ciudad queda un trabajo que realizar para conseguir la igualdad de oportunidades y que se visualice la importantísima labor de la mujer, en el área rural todavía nos queda más camino. Saberse se sabe, pero debe reconocerse mucho más. No ayudamos al marido, estamos en todo. Como mínimo y, en general, el 50% de lo que generamos es gracias a los dos. Siempre he defendido que primero nos lo tenemos que creer nosotras mismas. Por ello, desde la Asociación de Mujeres y Familias de Ámbito Rural (Amfar Alicante) desarrollamos jornadas sobre empoderamiento, charlas de autoestima, colaborando con importantes psicólogas y especialistas en este tema.
Apoyando a la Mujer Rural, por supuesto, también se contribuye a frenar el despoblamiento de los pueblos. Si la mujer se marcha fuera en busca de más oportunidades, este hecho arrastra a toda la familia. Por ello, deben impulsarse las medidas necesarias. Algunas muy importantes hacen referencia a las infraestructuras. Falta más transporte público y mejores vías de comunicación. Tenemos que conectarnos diariamente a Internet, cuando en muchos puntos de las ciudades no se puede. En los municipios de montaña todavía encontramos más dificultades.
También la seguridad es importante. Recuerdo cuando en los campos y en la huerta, dejábamos las puertas de los coches abiertas, no teníamos miedo. Después, empezamos a sufrir continuas oleadas de robos. En los últimos años hemos visto que se ha reforzado la seguridad. Vemos más coches de la Policía Local, Nacional o la Guardia Civil pasar por nuestras pedanías. Esta labor no debe abandonarse e incluso urge reforzarla. Muchas veces estamos solas en los bancales y fincas. Por ello, el riesgo para las personas es mucho más grande.
En resumidas cuentas, en Amfar Alicante seguiremos trabajando para apoyaros, para que se cubran nuestras necesidades y para que nuestra presencia y trabajo sea cada día más valorado. Seguir adelante y no os canséis. Vuestra labor es fundamental. Felicidades por vuestro trabajo y, por supuesto, en este Día Internacional de la Mujer Rural.