Un total de 26 parcelas de varios municipios de la Marina Baixa y próximos de El Comtat (Balones) y Marina Alta (Alcalalí) han registrado nuevos positivos en almendro de la ‘Xylella fastidiosa’ (subespecie multiplex), en lo que supone el tercer brote de esta bacteria en la Comunitat Valenciana.
Así lo ha comunicado este lunes 4 la consellera de Agricultura, Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Rural, Elena Cebrián, en Alicante a una veintena de representantes de municipios afectados en una reunión convocada por la Federación Valenciana de Municipios y Provincias (FVMP). En el encuentro también ha participado el director general de Agricultura, Roger Llanes, y le sucederán otros en Valencia y Castellón.
Los análisis en árboles de aguacate, cítricos, olivos y otras especies forestales han dado resultados negativos en todos los casos
Este tercer brote tiene como epicentro los municipios de Castell de Guadalest y Benimantell y poblaciones cercanas, con 23 de las 26 parcelas afectadas, y se suma al ocurrido a finales de junio y el de finales de julio, que también afectaron únicamente a almendros y en el mismo entorno, en todo caso sin casos positivos en las provincias de Valencia y Castellón. Asimismo, en esta zona alcaldes y vecinos han impedido que se talaran los árboles afectados por la xylella en plena recogida de la campaña.
En los dos focos anteriores se trataron 18,2 hectáreas con insecticida, de ellas 5,53 en zona forestal, y se eliminaron los arbustos del sotobosque y 304 almendros de cinco plantaciones.
La nueva zona demarcada, que incluye las referidas 26 parcelas y un radio alrededor de 10 kilómetros, comprende una superficie de 110.000 hectáreas de una treintena de municipios de las dos Marinas y l’Alcoiá-El Comtat.
En esta zona hay un total de 35 viveros y centros de jardinería que, en cumplimiento de la normativa europea, deberán controlar el movimiento del material de los vegetales para impedir su salida fuera de la zona, y tienen que investigar la trazabilidad para ver las salidas de material vegetal especificados de los últimos tres años.
En el estudio de posibles nuevos casos, los técnicos de la Consellería han analizado numerosos árboles de aguacate, cítricos, olivos y otras especies forestales, con resultados negativos en todos los casos, y también se tiene especial atención a los posibles puntos de entrada, como los puertos y aeropuertos y viveros.
El origen del foco de esta bacteria está aún por determinar, según la consellera, quien ha manifestado que esta cuestión es «muy difícil» de determinar.
La Universidad Politécnica de València realiza un estudio para valorar las pérdidas y determinar las indemnizaciones
Según Cebrián, la Consellería dispone de una partida de 1.150.000 euros para las tareas de erradicación de esta bacteria, que los expertos comparan con el ‘ébola’.
A esta cantidad hay que sumar fondos propios de la Consellería y las indemnizaciones que deberán ser concretadas por un estudio que ha sido encargado a la Universidad Politécnica de València (UPV). Este informe universitario deberá determinar el valor económico de las pérdidas y la orden de indemnizaciones para que sean abonadas «lo antes posible», en palabras de la consellera.
Ha exigido un apoyo «más contundente» para hacer frente a dichas indemnizaciones que atiendan a los agricultores, y ha recordado de que se trata de un problema que afecta a la península Ibérica.
En la reunión ha puesto de manifiesto que hay una normativa europea que es «taxativa» para erradicar la Xylella fastidiosa, que consiste en demarcar el ejemplar afectado, desarrollar el tratamiento fitosanitario adecuado, fumigar en un radio de 150 metros y erradicar completamente los árboles.
Por su parte, el presidente de la FVMP, Rubén Alfaro, ha pedido «unidad de acción de todas las administraciones para contener la plaga» tras la aparición de este tercer brote y que se pongan los medios materiales adecuados, así como la convocatoria de los consejos agrarios municipales para que la información llegue a los agricultores.