ASAJA Castilla-La Mancha ha remitido un escrito al consejero de Agricultura, Francisco Martínez Arroyo, para consultar cómo se aplicarán en la región las medidas en el sector del vino puestas en marcha por Real Decreto 557/2020, de 9 de junio, para hacer frente a la crisis causada por la pandemia de COVID-19. Asimismo, su presidente, Fernando Villena, al igual que en otras CCAA, cree que las ayudas a la cosecha en verde y la destilación “se han quedado cortas, el mercado no reacciona y las perspectivas no son muy halagüeñas”.
La organización agraria ha requerido información sobre las medidas que pondrá en marcha Castilla-La Mancha para garantizar la trazabilidad y la calidad de la uva, así como para estabilizar un mercado gravemente dañado por las consecuencias de la pandemia.
“SI NO HUBIERA SIDO POR DESTILACIÓN, HABRÍAMOS TENIDO MUCHOS PROBLEMAS EN LA RECOGIDA DE LA UVA DE ESTA CAMPAÑA”
En este sentido, ASAJA CLM ha ofrecido toda su colaboración a la Administración regional para la aplicación y gestión de las medidas que atañen a las condiciones de producción de la uva (rendimientos, grados…), así como a la trazabilidad para cumplir con la normativa europea de calidad del vino de la Zona vitícola C III b, a la que pertenece Castilla-La Mancha.
Por otro lado, en cuanto a las medidas extraordinarias puestas en marcha por el Real Decreto de cosecha en verde y las ayudas a la destilación de crisis y al almacenamiento de vino, según ha valorado el presidente de ASAJA CLM, Fernando Villena, “se han quedado cortas, el mercado no reacciona y las perspectivas no son muy halagüeñas”.
Villena considera que las medidas adoptadas por el Gobierno de España han partido con un presupuesto insuficiente y, en Castilla-La Mancha, “tampoco se ha ayudado con fondos como en otras comunidades autónomas”. Aun así, cree que “si no hubiera sido por destilación, habríamos tenido muchos problemas en la recogida de la uva de esta campaña de la vendimia, aunque quizá se produzcan, pese a ello”.
Igualmente, ha recordado al Consejero de Agricultura, que a mediados de agosto tendrá que decidir si aumentar del 10 al 15% las prestaciones vínicas, y confía en que, con la adecuada aplicación de la normativa, se consiga mejorar la situación del mercado del vino de cara a la próxima campaña.