La Guardia Civil ha detenido a seis vecinos de Almendralejo (Badajoz), implicadas en dieciséis robos de aceituna almacenada y vehículos agrícolas y de transporte en municipios pacenses y de las provincias de Toledo y Ciudad Real, a los que se les atribuye la sustracción 150 toneladas de aceitunas.
La delegada del Gobierno en Extremadura, Cristina Herrera, ha informado este miércoles en rueda de prensa del resultado de la «Operación Carrasqueña», con la que se ha conseguido desarticular un grupo dedicado al robo de aceitunas en cooperativas y puntos de compraventa.
Los ahora detenidos llegaron a sustraer en torno a 150 toneladas de aceitunas, por un valor de unos 70.000 euros, además de 12 camiones y remolques, según los detalles que se han dado de esta esta operación.
Habían actuado en 14 localidades distintas en las provincia de Badajoz, Toledo y Ciudad Real
De los seis detenidos, cinco son autores materiales de los robos, mientras que otro era el encargado de un punto de compraventa que recepcionaba y compraba las aceitunas sustraídas, a sabiendas de su procedencia ilícita.
Con esta investigación se esclarecen robos cometidos en las localidades pacenses de Solana de los Barros, Arroyo de San Serván, Montijo, La Garrovilla, Los Santos de Maimona, Villafranca de los Barros, Puebla de Alcocer, Casas de Don Pedro, Peraleda del Zaucejo, Llerena y Fuente de Cantos.
A ellos hay que sumar sustracciones en Fernán Caballero y Fuente del Fresno (Ciudad Real) y en Orgaz (Toledo).
En noviembre pasado, la Guardia Civil inició una investigación para esclarecer numerosos robos de aceitunas en cooperativas y puntos de compraventa en municipios pacenses, lo que permitió implicar a un grupo «perfectamente organizado» y de «gran movilidad».
Los dispositivos de vigilancia permitieron detectar como los detenidos transportaban en una furgoneta parte de las aceitunas sustraídas, que depositaban en un punto de recepción de Almendralejo.
El pasado 6 de enero, de nuevo se vio a miembros del grupo con un camión y un remolque sustraídos en Ciudad Real, cargado con 16 toneladas de aceitunas robadas del interior de una cooperativa de Orgaz (Toledo) y aunque se les dio el alto huyeron con el vehículo y posteriormente a pie.
Durante la pasada semana se procedió a la detención de los autores de los robos, de nacionalidad rumana, a quienes se les intervino furgonetas utilizadas para el transporte de aceitunas, y a la detención posterior de un ciudadano extremeño encargado del punto de recepción del fruto.
El comandante de la Guardia Civil, Manuel Delgado, ha dicho que con esta operación queda desarticulada esta banda organizada, y la delegada del Gobierno ha precisado que planificaban sus actos con antelación, a través de la sustracción de camiones, tractores y remolques, con los que se trasladaban a los lugares de almacenaje de aceitunas, cooperativas o puntos de compraventa.
De los citados puntos cargaban el fruto en los camiones y seguidamente en los extrarradios de las localidades o descampados rurales trasladaban las aceitunas a furgonetas propiedad de los mismos integrantes del grupo.
Después, transportaban y entregaban la aceituna en el punto de receptación de Almendralejo, donde el encargado intentaba camuflar y dar soporte legal a la mercancía.
APAG Extremadura agradece a la Guardia Civil detención de la banda
Por su parte, la organización agraria APAG Extremadura Asaja ha agradecido el trabajo realizado por la Guardia Civil al desarticular esta banda delictiva , a la vez que destaca que la mejora continuada de la seguridad en Extremadura pone de manifiesto la eficacia de los equipos dedicados a la protección del sector agrícola.
Así, destaca el compromiso de proximidad y de colaboración que la institución armada despliega con los extremeños, además del esfuerzo realizado por parte de la propia Delegación de Gobierno en la región para poner freno a estas tramas organizadas.
En este sentido, APAG Extremadura Asaja ha reclamado que se aplique con dureza la ley para «dar castigo» a estos presuntos delincuentes, que provocan daños económicos y morales incalculables al agricultor perjudicado.
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