ASAJA Salamanca ha denunciado un nuevo ataque de buitres en la provincia, el cuarto en menos de un mes. Esta vez, el suceso ha tenido lugar en la localidad de Zamayón, donde un ganadero ha encontrado muerta a una vaca que estaba pariendo, junto con su ternero.
Este nuevo ataque se suma a los ocurridos en las últimas semanas, evidenciando una vez más el problema creciente que los ganaderos enfrentan con los buitres, que atacan tanto al ganado en pastoreo como a las crías en proceso de parto. Lo más grave es que, según aclara el ganadero afectado, ya ni siquiera avisan a los técnicos de Medio Ambiente, “en anteriores ocasiones no hemos recibido el apoyo necesario. Los ataques no están subvencionados, por lo que las autoridades no actúan. Al final, es una pérdida de tiempo dentro de todo el trabajo que los ganaderos tenemos que hacer», señala con frustración el ganadero de la localidad.
ASAJA Salamanca recalca que estos ataques no solo son un golpe económico directo para los ganaderos, sino que también afectan profundamente la moral de quienes trabajan el ganado en la provincia. Los buitres, al no estar controlados adecuadamente, siguen atacando animales vulnerables sin que las autoridades competentes ofrezcan soluciones eficaces.
Desde la organización agraria, vuelve a instar a las autoridades y a los responsables de la gestión de la fauna salvaje a que tomen medidas urgentes para proteger al ganado y a los ganaderos de esta problemática creciente. ASAJA Salamanca exige que los ataques de buitres sean reconocidos como un problema que requiere una respuesta inmediata y eficaz, que contemple tanto el control