EFE.- Además de ser capaces de soportar la sequía, muestran un favorable rendimiento agrícola e industrial y tienen como antecedente más de una docena de variedades resistentes a plagas y enfermedades, precisó la especialista Rodríguez.

En Cuba las variedades más extendidas son Inca LP5 e Inca LP7, sembradas en aproximadamente el 45 por ciento de las áreas dedicadas al cultivo de arroz.

En la actualidad, se desarrolla en la isla un programa de inversiones que buscan incrementar la producción de arroz para disminuir las importaciones de ese alimento básico de la dieta de los cubanos con más de 70 kilogramos por persona al año.

Este año las proyecciones de producción ascienden a 394.000 toneladas del cereal después de que en 2012 la isla obtuvo 320.792 toneladas.

Cuba importa unas 400.000 toneladas al año, cifra que representa el 60 por ciento del consumo de los 11,2 millones de habitantes de la Isla.

Para impulsar la producción arrocera en el país con el objetivo de reducir las importaciones, el Gobierno cubano ha emprendido un programa que prevé lograr para el año 2016 la siembra de 253.000 hectáreas y alcanzar una producción de 538.000 toneladas de arroz.

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