EFE.- La nueva marca ayudará a estas pequeñas empresas, productoras de frutos secos, lácteos, aceites, conservas, vinos o chocolates, a mejorar sus ventas en los mercados exteriores, a potenciar su comercialización y, a la vez, a reducir gastos.
Según ha explicado hoy en Lleida la gerente de Catalonia Gourmet, Marta Amorós, la mayoría de las dieciocho empresas que forman parte de la marca son firmas pequeñas a las que les cuesta mucho exportar y dar a conocer su producto internacionalmente.
"Trabajando bajo esta marca paraguas podrán aprovechar las sinergias y acciones que se lleven a cabo", ha señalado.
El objetivo del ‘clúster’ es que estas empresas puedan vender sus productos ‘gourmet’ en los países más abiertos a este tipo de alimentos, como Alemania, los países escandinavos y el Reino Unido en Europa; Estados Unidos y Canadá en América, y Japón, China e India en Asia.
Por ahora, con el fin de promover internacionalmente estos productos selectos, la asociación está trabajando en la colocación de puntos de venta en las principales tiendas ‘delicatessen’ de las cadenas de gran distribución internacionales.
En este sentido, Amorós ha detallado que se está trabajando, por ejemplo, para tener un punto de venta en los almacenes Harrod’s del Reino Unido.
También en el ámbito catalán se ha firmado un acuerdo con el Monasterio de Monserrat para poner un punto de venta de la marca en las tiendas del santuario, que reciben miles de visitas de turistas de todo el mundo.
La marca prevé, además, contar con una tienda en Internet a partir de septiembre, mes en el que también se ha organizado una misión comercial de empresarios de países escandinavos a Cataluña con el fin de que éstos conozcan las empresas y los productos de la marca y se puedan establecer relaciones comerciales en el futuro.
Las dieciocho empresas catalanas que forman parte de la marca Catalonia Gourmet facturan entre todas unos 50 millones de euros anuales y dan trabajo a más de 350 personas.
En toda Cataluña, según datos aportados por la entidad, hay 280 empresas de alimentación y vinos y cavas de alta gama, que facturan unos 440 millones de euros cada año.
Por el momento, sólo dos empresas de Lleida, la productora de mermeladas y conservas Marge y la de aceite de oliva ecológico Molí Duran, se han unido a esta iniciativa.