En España, cerca de 20 millones de personas, casi la mitad de la población, sufre de hemorroides, que tienen más presencia durante el verano, pero que pueden combatirse gracias al tipo de alimentación que sigamos. En concreto, el brócoli contiene dos nutrientes que pueden ayudar a prevenirlas o a reducir su aparición, en el caso de ya padecerlas: un flavonoide, la rutina, y la fibra.
Las hemorroides son la patología proctológica más frecuente y por la que más españoles se preocupan cada año. Se presentan cuando las venas de la zona rectal se estiran y se inflaman por un exceso de presión y pueden causar dolor, comezón, ardor y sangrado, aunque también pueden pasar desapercibidas.
En verano, suelen tener más presencia, ya que el aumento del calor y de la sudoración provocan que el cuerpo elimine líquidos y, al no ser repuestos tan a menudo, las heces tienden a compactarse. También se debe a los cambios en los hábitos alimenticios y, con ello, la reducción del consumo de fibra, sumada al incremento de la ingesta de alcohol y de comidas copiosas, especiadas o picantes.
Los flavonoides y la fibra, componentes para acabar con las hemorroides
Practicar ejercicio físico, evitar el estrés físico y seguir una dieta que procure una buena digestión y que reduzca el estreñimiento, la diarrea, los gases y la inflamación es una recomendada forma de prevenirla.
El brócoli es uno de esos alimentos que participan en la disminución de las hemorroides. Su contenido en rutina, un flavonoide presente también en los cítricos y en las cebollas, «ayuda a mantener la fortaleza de los vasos sanguíneos y es una de las posibles funciones beneficiosas para combatir este doloroso problema», según Diego A. Moreno, investigador del Laboratorio de Fitoquímica del Departamento de Ciencia y Tecnología de Alimentos de CEBAS-CSIC, que colabora de forma activa con la Asociación +Brócoli. Además, también reduce la severidad y la duración de sus síntomas.
Desde el CEBAS-CSIC destacan, a su vez, el alto contenido en fibra (insoluble) del brócoli, que ayuda a aglutinar y a ablandar las heces, lo que facilita su expulsión; promueve movimientos intestinales regulares y conlleva la reducción de la irritación de las hemorroides. Se recomienda una dieta rica en agua y en fibra, en la que esta se incluya poco a poco para evitar los gases y la inflamación. Alimentos como los higos, el arroz integral, las pasas y las ciruelas también la aportan.