A su juicio, la propuesta de revisión de la directiva europea de productos del tabaco y la reforma de la Política Agraria Común (PAC) son "amenazas" que "pueden incidir muy negativamente tanto para Extremadura como para España u otros países europeos grandes productores de tabaco", como Italia o Polonia.
La nueva directiva, que amplía la talla de las advertencias sanitarias en las cajetillas y prohíbe el uso de aromas como el mentol, "no logrará reducir el consumo de tabaco", sino "poner trabas a la producción", afirmó Echávarri.
En cuanto la reforma de la PAC para el período 2014-2020, el consejero reclamó que los cultivos tabaqueros puedan ser considerados como "productos acoplados", de modo que sean los propios Estados miembros los que decidan si éstos pueden optar a ayudas comunitarias.
Si el Parlamento Europeo y los Veintisiete dieran su visto bueno a la nueva directiva del tabaco y la PAC se aprobara sin dar opción a las ayudas comunitarias para el sector, los cultivos tabaqueros "podrían desaparecer, porque dejaría de ser rentables", afirmó Echávarri.
"En la actual situación de crisis, no podemos permitirnos ni una pérdida de puestos de trabajo ni de recaudación", subrayó el consejero extremeño, quien añadió que en la provincia de Cáceres hay unas 20.000 familias dependen de forma directa o indirecta de estos cultivos.
En la misma línea, el director general de la Mesa del Tabaco, Juan Páramo, afirmó que el sector tabaquero "está a favor de la regulación" por parte de la UE, y en concreto, "de medidas que estén basadas en evidencias científica y con eficacia demostrada para prevenir el consumo y el acceso de los menores al tabaco".
Sin embargo, las medidas incluidas en la nueva directiva europea "no están avaladas científicamente y no van a reducir el consumo sino reducir la pérdida de valor del sector, con las implicaciones que eso tiene de cara a pérdida de puestos de trabajo y de recaudación", destacó Páramo, quien también participó en el debate de hoy.
La prohibición de determinados variedades y formados de tabaco generaría "un aumento del comercio ilícito", que en España ya supone el 10 % de las ventas totales del sector, afirmó el director general de la Mesa del Tabaco, integrada por tabaqueras, estanqueros, cultivadores, fabricantes de máquinas expendedoras, transformadoras y la CEOE.
Según datos de esta asociación, la directiva del tabaco pone en peligro 56.000 empleos en España, así como la aportación anual de 9.800 millones de euros que el sector hace a las arcas públicas en forma de impuestos.