“Estas actuaciones se han ejecutado con el objetivo de restablecer la función principal del río y defender sus márgenes contra las avenidas, así como formar un corredor fluvial a lo largo del cauce, de sus riberas y terrenos anexos, potenciar la vegetación presente y adecuar las infraestructuras hidráulicas existentes que forman parte del patrimonio cultural de Aspe”, ha destacado Ureña.

    Para conseguir estos objetivos, se ha actuado en una longitud de cauce y márgenes del río de unos 9 kilómetros, desde su inicio, en el Camino Viejo de Hondón, hasta su desembocadura en el río Vinalopó.

    María Ángeles Ureña ha señalado que, “con estas obras, se dota al área del cauce del río de un pasillo verde que mejora el paisaje urbano y el municipio dispone de un espacio para el paseo y el desarrollo de prácticas deportivas”.

    Se han efectuado trabajos de limpieza, mantenimiento de la vegetación actual y eliminación de especies invasoras, ello dirigido a dar accesibilidad al río y propiciar su uso lúdico y recreativo.

    Asimismo, y aparte de las obras de acondicionamiento y ordenación del vertido del efluente de la EDAR al río y de regulación de caudales de los Regantes de Aspe, se ha construido una senda cicloturística y plantado árboles y arbustos a lo largo de las márgenes del cauce y áreas de descanso.

    “Con esta actuación no solo se pretende la recuperación de los ecosistemas ligados al cauce, sino también poner en valor una estructura territorial que conecte transversalmente los espacios naturales más importantes de la zona para uso y disfrute de sus ciudadanos", ha concluido Ureña.

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