EFE.- «Esto es un punto de inflexión, es una ley que da instrumentos y armas para que el sector se pueda defender y se puedan rentabilizar las fincas rústicas», aseguró el conseller, en una entrevista a Efe.
Tras dos meses de negociaciones «el espíritu de la ley se mantiene» con ese objetivo de «poder garantizar el futuro del paisaje del territorio a través de la agricultura y la ganadería» y ahora se está perfilando «cómo se puede hacer para que las cosas vayan mucho más rápido de lo que van hoy».
Company ha asegurado que su departamento trabaja para eliminar burocracia y trabas innecesarias y «dejar muy claro qué es lo que se puede hacer y lo que no, y que aquello que sí se puede hacer, sea de la forma lo más rápido posible y con todas la garantías».
La ley se inspira en los derechos para desarrollar actividades complementarias en las instalaciones agrícolas, ganaderas y agroalimentarias que determinaron las leyes estatales de modernización de explotaciones y de desarrollo rural.
Tras contar con la Federación Empresarial Hotelera de Mallorca, la Asociación de Agroturismos y la Conselleria de Turismo y Deportes, la ley establece «ventajas» ligadas al turismo para las explotaciones agrarias preferentes que son «aquellas con un número importante de hectáreas», señala el conseller. «Ya está perfilado y totalmente de acuerdo», recalca.
Company ha manifestado su interés en que el texto legislativo cuente con el máximo consenso tanto del propio sector como de las administraciones a las que incumbe antes de que sea aprobado y puesto a exposición pública. «Quiero que esté lo más consensuada y pulida posible a la hora de publicarla», ha afirmado.
Desde que el Govern entregó el texto inicial de esta ley sectorial a las organizaciones agrarias profesionales hace dos meses se han ido «corrigiendo matices» y eliminando posibles obstáculos para su aprobación.
«No creo que quede ningún escollo», ha señalado Company, quien ha recalcado que se han tenido en cuenta las aportaciones del sector en los ámbitos de la agricultura, ganadería y gestión forestal.
La voluntad de que la ley sea fruto del consenso ha hecho que su aprobación se haya retrasado respecto a lo previsto, ha admitido el conseller, quien ha destacado que el sector ha realizado aportaciones interesantes y «muy necesarias para que salga la mejor ley posible, estable y de futuro».
Company da por finalizadas las reuniones con el sector turístico y agroturismos y señala que la redacción de la ley aborda su «recta final» con el análisis de los informes jurídicos sobre competencias y encuentros con los consells insulares.
Otro de los motivos que la ha retrasado es un informe solicitado «oficiosamente» al Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, recibido esta semana.
Company confía en que el texto esté listo «en cuestión de días». El borrador de la ley llegará al Parlament en el inicio del próximo curso parlamentario que arranca en septiembre y antes de eso deberá haber sido aprobado por el Consell de Govern y puesto a exposición pública.