"No vamos a consentir explotaciones mineras que van contra los intereses de los ganaderos", ha afirmado Aurelio Pérez, aunque ha reconocido que "en la mayoría de los casos la ley favorece los intereses mineros sobre los ganaderos".
Para COAG, los ganaderos se encuentran en una situación de indefensión cuando una empresa quiere explotar una mina en zona agraria, ya que la legislación actual da prioridad a la actividad minera sobre la agraria.
También se ha referido a las pérdidas que acarrean para los profesionales del campo cualquier tipo de excavación para fines mineros, ya que, de producirse, los terrenos podrían dejar de recibir las subvenciones PAC de la Unión Europea.
COAG ha explicado que muchos ganaderos del entorno de La Alameda de Gardón les han pedido asesoramiento ante la solicitud de la empresa australiana Berkeley de cambiar de forma excepcional el uso del suelo rústico de esta localidad para que se le conceda una licencia de minería de uranio.
Berkeley pretende abrir en La Alameda de Gardón, zona catalogada como reserva estatal de uranio, una mina sobre una zona de 911 hectáreas para extraer un potencial de 30 millones de libras (cada libra 450 gramos) de uranio.