En este sentido, la organización agraria también apunta al Gobierno "que mira hacia otro lado y está permitiendo que se esté abusando nuevamente de los agricultores almerienses que desde el inicio de campaña ven cómo las cotizaciones cada vez bajan más".

       En este contexto, en la protesta ante el Lidl de Almería, el secretario provincial de COAG en Almería, Andrés Góngora, hizo hincapié en la necesidad de levantar la voz ante esta situación "insostenible" y recordó que las grandes cadenas de distribución, lideradas por las alemanas, "están pisoteando a los agricultores de Almería".

No se cubre ni los gastos a pesar de venderlo todo, por lo que prefieren ‘regalarlo’

    Góngora reclacó que con los actuale sprecios no se cubre ni los gastos de producción, a pesar de que las ventas y las exportaciones cubran la gran mayoría de la producción, por lo que optaron por regarlar las verduras para que esta realidad también se conocida por los consumidores, quiens por un día fueron los beneficiados, ya que esta caída de los precios no se refleja en lo queellos pagan al comprar las hortalizas en los supermercados.

      Por eso, puso como ejemplo la berenjena, que estos días se encuentra a 0,15 euros el kilo en origen, "lo que no cubre ni los costes de recolección", mientras que producir un kilo cuesta en torno a 0,48 euros por kilo. Con otras tampoco se llega al mínimo de los costes de producción, pues el agricultor percibe 0,20 euros el kilo en calabacín, mientras su coste de producción es de 0,41; el tomate se paga a 0,45, frente a los 0,49 que cuesta producirlo; el pepino se está vendiendo a 0,20 y su coste es de 0,42; y el pimiento está en subasta a 0,54 euros el kilo, frente a los 0,59 de coste de producción.

No se utilizan los mecanismos de retirada para controlar los precios

     El secretario provincial de COAG en Almería también denunció que "a pesar de la existencia de mecanismos de gestión de mercado, "después de lo sucedido con el veto ruso y las estructuras comerciales no los están utilizando, están usando las ayudas por parte de las administraciones para aliviar una situación de mercado como la actual, al enviarse todo a los mercados, mientras que debería llevarse a cabo una serie de retiradas".

     Por último, la organización agraria retera que esta situación genera "un grave problema" también para el Gobierno central, pues su ley de mejora de la cadena alimentaria no tiene competencias en la comercialización al exterior y se ciñe exclusivamente a las operaciones realizadas en el mercado nacional.

      "La ley carece de aplicación fuera del territorio nacional", con lo que una denuncia ante la Agencia de Información y Control Alimentarios, esta no tiene capacidad de investigación, lo que deja únicamente la opción de acudir a organismos de Competencia de la UE.

×