La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos, UPA de Castilla-La Mancha ha informado de la nueva ayuda de mínimis que el Gobierno de la región ha publicado para los ganaderos de vacuno. Una ayuda que afectará a más o menos doscientas explotaciones con una dotación superior a los 250.000 euros.
Los responsables de la organización agraria aprecian el gesto político y la aportación económica para un sector que está pasando una de sus peores etapas del sector. En concreto la caída de precios ha motivado que muchas explotaciones se encuentren en situación crítica en zonas como Toledo. La Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha ofrece una buena ayuda que «no vamos a rechazar, una buena iniciativa pero no es la solución», afirman desde UPA CLM.
upa clm insiste en la concesión de ayudas directas al vacuno de leche para proporcionar cierta liquidez en el corto plazo
También añaden que esta nueva orden de ayuda de mínimis al vacuno no resuelve de manera definitiva los problemas que atraviesan los ganaderos pero al menos es un gesto político y una aportación económica a valorar. De hecho, hay que remarcar que España es un país que produce menos leche de la que consume y actualmente la Unión Europea regula que «si quieres producir tienes que recortar».
La organización lamenta que en España y en Castilla-La Mancha, los ganaderos se acogen a la nueva ayuda de la Unión Europea «porque están estrangulados pero los de otros países no, con lo cual las explotaciones españolas seguirán disminuyendo su producción mientras que en otros países no lo harán y seguirán trayendo leche a España».
La organización agraria ya ha valorado en varias ocasiones la mala situación del sector y se ha reunido con representantes de la Consejería de Agricultura para mostrarles la necesidad de tomar medidas que regulen el sector de manera definitiva. Entre estas medidas se encuentra la concesión de ayudas directas a los ganaderos de vacuno de leche para proporcionar cierta liquidez en el corto plazo de manera que sus explotaciones puedan continuar con su actividad en tanto el mercado se estabiliza y los precios dan un respiro a las explotaciones de Castilla-La Mancha.
Desde la UPA en Castilla-La Mancha ya ha explicado que el sector está sufriendo desde hace unos cuantos años unas caídas en los precios que han puesto en peligro las explotaciones de la región, muchas de ellas de carácter familiar y ubicadas en el entorno rural, con lo que ello implica tanto de consolidación de empleo como de población. Hay que recordar que en el mes de mayo el precio pagado a los ganaderos españoles se encontraba en 29,2 céntimos el litro, dos céntimos por debajo al mes anterior. Y muy inferior a los 30,8 céntimos el litro de enero de 2016.
Aunque si estos datos duelen es importante dejar claro que algunos ganaderos reciben 22 céntimos el litro a día de hoy, lo que hace inviables las explotaciones. De ahí que una ayuda de mínimis como la actual, pueda suponer un respiro relativo al sector.