Castilla-La Mancha espera que antes de que finalice el año se deje por escrito, en papel, en “negro sobre blanco”, un trato discriminatorio en las ayudas para las mujeres en la nueva PAC, una “discriminación positiva necesaria y muy justa”.
Así lo ha manifestado el consejero de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, de manera previa a su participación la mesa de expertos, englobada dentro de la jornada ‘Mujeres rurales: los pilares del impulso del medio rural’, organizada por Federación de Asociaciones de Mujeres Rurales (Fademur) a nivel nacional con motivo del Día Internacional de las Mujeres Rurales que se celebra el próximo 15 de octubre.
Una mesa en la que han estado presentes, junto a Martínez Arroyo, la directora general de Desarrollo Rural, Innovación y Formación Agroalimentaria del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, Isabel Bombal Díaz; la directora general de Políticas contra la Despoblación, Juana López Pagán, así como la directora del Instituto de las Mujeres, María Antonia Morillas, y dos emprendedoras, Ana Corredoira y Trinidad Navarro López, llegadas desde Galicia y Almería, en una actividad moderada por la secretaria de Fademur, Montse Cortiñas.
El consejero ha reconocido que, aunque se están dando los pasos, aún queda mucho que reivindicar y seguir consiguiendo frutos, sobre todo cuando Naciones Unidas dice que no existe ningún país en el mundo en el que exista la igualdad efectiva de género.
De ahí, la importancia de seguir trabajando desde las administraciones para visibilizar a las mujeres rurales y reconocer su papel nediante la discriminación positiva, porque ellas, ha dicho, sufren una doble discriminación, frente a los hombres y frente a las mujeres de las ciudades.
Y esta discriminación hay que “atajarla”, ha subrayado, y es un reto que en Castilla-La Mancha se va a abordar de la mano con Fademur.
En la Comunidad Autónoma se ha aprobado la Ley del Estatuto de las Mujeres Rurales que pretende que las mujeres sean visibles “y aparezcan en los papeles” y estén en lugares donde se tomen las decisiones. De esta forma, se ha mostrado orgulloso de haber logrado en la región una ley que garantiza la presencia de las mujeres en los órganos de decisión en cooperativas, organizaciones agrarias o las empresas del sector agroalimentario.
Además, el consejero ha destacado que, gracias a la Ley del Estatuto de las Mujeres Rurales, por ejemplo, “una de cada tres jóvenes incorporados a la agricultura o ganadería de Castilla-La Mancha son mujeres”.
En datos, ha explicado que antes del 2015, ese porcentaje era del 14 por ciento y, hoy, son el 33 por ciento, de los jóvenes incorporados al sector. Así, de 4.000 jóvenes emprendedores en el sector en la región desde 2016, una tercera parte son mujeres, “un éxito sin precedentes”.