EFE.- En concreto, el Servicio de Protección de la Naturaleza de Asturias (Seprona), y la Unidad Central Operativa de Medio Ambiente (Ucoma) desplazados desde Madrid son los encargados de hacer las notificaciones derivadas de la llamada «operación Loki», informa la Guardia Civil.

Esta operación se inició en junio del pasado año, a raíz de las denuncias presentadas por dos asociaciones ecologistas en las que se ponía en conocimiento la Guardia Civil las presuntas irregularidades por el pago de las indemnizaciones por los ataques del lobo al ganado.

De los más de 10.000 expedientes analizados por la Guardia Civil, y tras cruzar los datos de pago de la Consejería del Principado y Agroseguro, se pudo comprobar que en más de 1.200 se había realizado una doble reclamación de los daños ocasionados a un mismo animal.

La Guardia Civil está revisando los pagos efectuados desde el año 2010, y son las patrullas territoriales del Seprona, quienes desde el día 17 de este mes se encargan de notificar a los ganaderos afectados su imputación en un supuesto delito de fraude.

×