También hubo talleres en vivo, donde a lo largo de los días de la feria se pudieron ver encajeras, pintores de cerámica, artistas de mosaicos o lagarteras.
Por último, Castilla-La Mancha hizo especial hincapié en el turismo de naturaleza, destacando sus dos parques nacionales, el de Cabañeros y Tablas de Daimiel, y el parque natural de las Lagunas de Ruidera, junto al turismo congresual y termal, con información sobre los balnearios de las diferentes localidades.