Según señala el Gobierno en un comunicado, el convenio se sustenta en unos principios que priorizan la prevención de la generación de los residuos, su reutilización o reciclado, la valorización energética y, en último término, la eliminación.
En virtud de este acuerdo las consejerías se comprometen también a mantener informados a los ganaderos de los aspectos legales del sector, especialmente en lo relativo a la gestión de plásticos, y a formar para la mejora de la competencia ganadera.