EFE.- Aunque un rato antes, el ministro eludió comentar la sentencia y se remitió a lo manifestado por la titular de Fomento, Ana Pastor, al término del Pleno del Congreso ha explicado que el suceso del Prestige fue “complejo de gestionar” porque, entre otras cosas, hubo que cerrar el caladero muchos meses e indemnizar a los pescadores por el parón en la actividad. Ha manifestado respeto por la sentencia, que, gustará a unos y a otros no, ha recalcado, pero que deja claro que no hubo delito ecológico y sólo establece un delito de desobediencia por parte del capitán del barco. Cañete, que era también el responsable de Agricultura y Pesca en aquel momento, ha querido recordar que el ecosistema marino en el litoral Cantábrico se ha recuperado y, además, a partir de ese episodio se ha mejorado la seguridad marítima. Las inspecciones de buques han aumentado, ha dicho el ministro, y España cuenta ahora con unos planes de contingencia para siniestros marítimos, que ha aprobado este Gobierno, además de una estrategia de actuación para afrontar situaciones similares en el futuro. “Siempre existe el riesgo pero ahora mismo tenemos unos planes que hacen que la navegación sea más segura en nuestro litoral”, ha recalcado.
