Aún falta mucho para que oficialmente se inicie el proceso de negociación de la reforma de la PAC, pero desde la Comisión Europea se empiezan a dejar caer varias propuestas y cambios en la PAC que podrían afectar muy negativamente a la agricultura española, que ya empieza a posicionarse en contra de algunas de las medidas que podrían implantarse a partir del 2020 o, quizás, del 20121.
Así, sobre la mesa ya se está hablando de cuatro propuestas a cual peor: Cofinanciación, fin de los derechos históricos, cambio en las ayudas directas y contratos con productores. propuestas que, en su mayoría ya han sido incluso rechazadas por el propio Ministerio de Agricultura y por las organizaciones agrarias, pero que comienzan a pender de un hilo sobre la cabeza de los agricultores y ganaderos españoles y europeos.
El presidente de Asaja Córdoba, Ignacio Fernández de Mesa, ha sido uno de los dirigentes agrarios españoles que ha estado recientemente en Bruselas para hablar de estas cuestiones y uno de los primeros en dar la voz de alarma sobre lo que puede venir si no se actúa con determinación para evitar que las alternativas que se barajan en la CE se acaben implantando con la justificación de la caída del Presupuesto tras el Brexit.
Cuatro puntos básicos que se barajan en Bruselas para el cambio en la PAC
Según recoge P. Cruz en abc.es, «estamos muy preocupados, porque si se cumplen las intenciones de la Comisión Europea (CE) en torno a los cambios en la PAC podremos estar asistiendo en unos años al final de la agricultura en nuestro continente».
Así, el dirigente agrario detalla los cuatro puntos principales que se podrían estar barajando actualmente en el seno de Bruselas para ir perfilando los cambios en la PAC que quieren imponer algunos Estados en la próxima reforma.
1. Cofinanciación. Se trata de establecer la cofinanciación en la concesión de las ayudas de modo que la carga económica se distribuya a partes iguales entre la CE y los países miembros, de modo que Europa no sea la única que haga frente a este gasto como ocurre hasta ahora. «Nosotros pensamos que esto es un disparate porque supondría la desaparición de la unidad de mercado», resaltó el máximo responsable de Asaja. Cabe recordar que la ministra, Isabel García Tejerina, ha dejado muy claro que el Gobierno español rechaza esta posibilidad.
2. Contratos con productores. Una segunda medida contemplada por los responsables comunitarios es firmar contratos con los productores para que éstos proporcionen bienes y servicios públicos que favorezcan el cuidado del medio ambiente.
3. Derechos históricos. A todo lo anterior se suma la intención de Bruselas de acabar con los derechos históricos que recoge la actual PAC, una posición fruto de la presión de los países del Este, que aducen estar en desventaja con las naciones con más antigüedad en la Unión Europea, según explicó Fernández de Mesa. Curiosamente, esta propuesta viene siendo defendida, pero en su aplicación a nivel nacional, por algunas CCAA.
4. Cambiar el pago directo. La última de las medidas previstas en los informes preliminares de la nueva política agraria es la reformulación del pago directo de las subvenciones a los agricultores, para lo que sus autores aducen la necesidad de mejorar la uniformidad de la renta de los productores europeos. «Creemos que eso supondría la pérdida de fondos para países como España, Francia o Alemania», señaló el presidente de Asaja Córdoba. El Comité Europeo de las Regiones ha hecho algunas aportaciones a estas medidas, entre las que se encuentra que la cuantía de las ayudas dependa, en una parte de ellas, del empleo generado en las explotaciones.